La semifinal del VAR y de Brayan Cortés

El VAR llegó a Chile. Con un penal en favor de Universidad Católica y en contra de Colo Colo. Una mano de Insaurralde a los 68', que solo se vio en el monitor pero que estuvo bien cobrada, hizo debutar la tecnología que asiste a los árbitros. Y mientras el defensa se agarraba la cabeza acusando la culpa, Aued decretaba de zurda el 1-0 para los cruzados.

Así comenzó a definirse la primera semifinal de la Copa Chile. La que se jugó. Un partido muy cerrado, de fuerzas parejas, pero que siempre le dio un margen de superioridad al actual campeón del fútbol criollo. Lo curioso es que ese dominio no se traducía en opciones claras para anotar, a diferencia de las que tuvo el Cacique con Gabriel Costa a los 13 minutos del primer tiempo. El uruguayo nacionalizado peruano falló frente a Dituro, de la misma forma en que falló buena parte de las jugadas donde fue protagonista. Una extensión del bajo rendimiento que exhibió en la temporada anterior.

Ya está dicho. Por una estrecha diferencia, la UC se vio más sólida, especialmente por su juego por las bandas. Con Fuenzalida (retrocedido al puesto de lateral) y Lezcano armando una dupla muy peligrosa. Por la derecha, en tanto, Puch mostraba chispazos, suficientes para complicar a la defensa rival. Pareciera que es cosa de tiempo, de aceitar mejor la máquina, de que los jugadores incorporen más la idea de Ariel Holan, para que Católica vuelva a ser el equipo dominante a nivel local.

En Colo Colo debutaron también Matías Fernández y Nicolás Blandi. Ambos ingresaron en el segundo tiempo. El argentino, que entró para buscar el empate, tuvo una clara que también contuvo Dituro.

Los albos se volcaron en ataque y lo encontraron, también gracias al VAR. Porque una paloma de Parraguez acabó con la pelota golpeando en el brazo de Cornejo. Otra mano bien detectada por la videoreferencia, que sirvió para que Valencia convirtiera el 1-1, que obligó a definir en todo desde los doce pasos, siempre emotivos.

La serie partió con yerro del mismo Aued y con el estadio (el sector de Colo Colo, obviamente) gritando el gol de Matías Fernández. Fue el comienzo ideal para el Cacique, que abrochó su paso a la final del miércoles con una actuación soberbia de Cortés bajo los palos. Además del tiro a Aued, tapó el penal de Puch. Valencia firmó el triunfo y los albos volverán a Temuco, para enfrentar a la U en la primera versión del Superclásico en 2020. Después de tantas semanas sin fútbol, el deporte más popular del país regreso lleno de emociones.