La hinchada del Liverpool es una de las más valoradas a nivel mundial. No solo por el ruido que hacen, sino por la fidelidad con su equipo. El clásico "Nunca caminarás solo", es prácticamente un estandarte para los reds de Anfield. Una canción icónica que hoy, aunque no mientras se entonaba, tuvo una representación gráfica con uno de los jugadores que peor lo ha pasado en el mundo, en el último tiempo.
Loris Karius, el villano de la final de Champions League por sus errores ante el Real Madrid, volvió a jugar en el estadio del Liverpool por primera vez desde aquel encuentro. Entró en el segundo tiempo por la gran contratación del equipo de Jurgen Klopp, el brasileño Alisson Becker. Apenas hizo su ingreso, el alemán recibió una gigantesca ovación de parte de su gente, que le acompañaban de pie en su recorrido a la portería. Él, tan emocionado como sorprendido, agradeció el cariño aplaudiendo a sus hinchas.
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