Días antes de que Beñat San José informara que se acogía a la cláusula de rescisión de contrato, que se iba, Católica ya había contactado al menos con un entrenador para asumir la banca. Juan Tagle sabía que el español evaluaba ejercer la fórmula de salida establecida en su contrato y el club entendió que tendría que salir a buscar entrenador para 2019.
Había uno libre, recién despedido y muy cotizado en el mercado chileno: Eduardo Berizzo, a quien el Athletic de Bilbao decidió despedir el 4 de diciembre por malos resultados. Desde ahí, el argentino tenía total potestad sobre su futuro.
Su amistad con el gerente deportivo de Cruzados, José María Buljubasich, es conocida. De hecho, en la precordillera cuentan que la comunicación entre ambos es fluida, por lo que no se limita solo al ámbito profesional, sino que también personal.
En ese sentido, fue la primera carta sondeada para suplir al español, aunque este aún no había dicho que se iba. Pero también fue la primera opción en ser descartada. Según su círculo cercano, el ex defensa no tiene ningún interés en dirigir clubes chilenos por el momento.
Berizzo estuvo cerca de ser DT de la UC en 2014, pero finalmente el transandino firmó en Celta de Vigo.
Ahora, la búsqueda del futuro entrenador se concentra en Argentina, hasta donde viajarán autoridades del club en los próximos días.
La Tercera le consultó a Cruzados por la búsqueda de entrenador antes de conocerse la salida de San José y el contacto con Berizzo. "El club no se va a referir a nombres específicos. Lo único que podemos decir es que no nos hemos reunido con ningún técnico ni antes ni después de la salida de San José", respondió la sociedad anónima.
Según informó la concesionaria estudiantil, a través de un hecho esencial enviado ayer a la Comisión para el Mercado Financiero, el adiestrador europeo debe indemnizar con US$ 50 mil al cuadro de la franja por su salida anticipada, lo que equivale aproximadamente al salario de un mes del cuerpo técnico. De haber renunciado después de los siete días de plazo, San José habría tenido que pagarle a la UC US$ 600 mil (unos 409 millones de pesos).
El técnico, que ayer envió una carta de despedida (ver nota en este mismo sitio), no lo pasó del todo bien en San Carlos. Distintas fuentes señalan que el hispano tenía entre ceja y ceja a Aued y Buonanotte, ya que no eran de su gusto futbolístico en las posiciones que ocupaban: volante mixto y enganche. Desde el primer semestre, San José sentía que Luli y el Enano no encajaban en su esquema.
Esa insatisfacción fue predisponiendo a San José contra esos jugadores, al punto de erosionar la relación con ambos, señalan conocedores de la situación. Su estilo ultra obsesivo también cansó a algunos jugadores, ya que el DT era de llamarlos a altas horas de la noche para darles una instrucción específica si lo consideraba necesario.