Hasta aquí llegó la participación de Universidad Católica en la Copa Libertadores 2019. Se acabó. Gremio se impuso por 2-0 y sepultó las ilusiones cruzadas. Una despedida triste, no solo por el resultado, sino también por la oferta de juego que hizo el cuadro de Gustavo Quinteros. Sin ideas, sin chispa, sin merecimientos para dar la sorpresa en Brasil.
Para ser un partido de vida o muerte, la UC lo encaró con bastante apatía desde el inicio. Con temor, quizás. Preocupada por no ser sorprendida, pero renunciando al arco rival. Y lo cierto es que Gremio se vio contenido en ese inicio. Vale decir que los arqueros eran simples espectadores.
Pero como tantas veces les ha pasado a los equipos chilenos, esa concentración total se derrumbó con una jugada de primero básico. Un balonazo frontal de unos 40 metros, una diagonal estimulada por una marca infantil y una definición cara a cara con el portero. Dituro fue la víctima, Alisson, el victimario. Y Juan Cornejo, cuestionado hace varias jornadas, el responsable de la pobre custodia del brasileño.
El conjunto chileno estaba obligado a ganar y a los 23 minutos ya perdía por la mínima. El sueño de seguir con vida en la Libertadores se diluía en Porto Alegre. La lógica y la exigencia del momento hacían suponer en un vuelco total de Católica en busca del empate, para luego pensar en la remontada épica. Nada de eso pasó. El compromiso siguió casi al mismo paso. Con pocas llegadas en ambas áreas, con los porteros activos para cortar algún centro o cuando sus compañeros los habilitaban. Dituro, de todas formas, salvó una pelota de gol.
¿Y Católica? Recién a los 40 minutos tuvo su primera llegada en serio. Gracias a un error del meta Paulo Victor y el intento de Luciano Aued en el rebote. Eso fue todo lo que mostró el elenco de Gustavo Quinteros en la primera mitad, que parecía resignado frente al control de la pelota de sus rivales.
Lo mejor para los universitarios fue el final de la fracción. Había que hacer cambios profundos de cara al complemento. Quinteros, sin embargo, no movió mucho las piezas. Buscó ganar más presencia en el medio con la salida de Stefano Magnasco y el ingreso de Carlos Lobos (hizo retroceder al Chapa Fuenzalida al lateral derecho), pero el ajuste tuvo muy poco efecto en el desarrollo del juego. Gremio seguía siendo el dominador y estaba mucho más cerca del 2-0. ¿Alguna llegada de Católica? Ninguna. Cero.
En ese escenario, daba la impresión de que la UC estaba conforme con la clasificación a la Copa Sudamericana, que ya tenía en su poder antes de entrar a la cancha. Porque a la hora de hablar de una oposición real al ímpetu de los gaúchos, el elenco franjeado simplemente no se presentó. En los 76', Thaciano puso el segundo tanto local.
Universidad Católica se despide de la Copa Libertadores. El campeón del fútbol chileno, el actual puntero, el que domina con largueza en los campos locales, sucumbió sin argumentos frente a uno equipo de andar muy irregular en Brasil. Le queda el consuelo del torneo B de este lado del mundo, aunque ese nunca fue el objetivo para el que se armó este plantel.
Ficha del partido
Gremio (2): Paulo Victor; Leonardo Games, Geromel, W. Kannemann, B. Cortez (46', Juninho Capixaba); Michel, Maicon (78', Luan); Alisson, Jean Pyerre (68', Thaciano), Everton; André Felipe. DT: Renato Gaucho.
U. Católica (0): M. Dituro; S. Magnasco (56', C. Lobos), G. Lanaro, B. Kuscevic, J. Cornejo; C. Fuentes, L. Fuentes (83', D. Buonanotte); J. P. Fuenzalida, C. Pinares, E. Puch; D. Riascos (74', S. Sáez). DT: G. Quinteros.
Goles: 1-0, 23', Alisson recibe un pase largo y define con zurdazo cruzado; 2-0, 76', Thaciano define con arco descubierto tras centro de Alisson, quien le robó la pelota a Cornejo.
Árbitro: N. Pitana (ARG). Amonestó a Kannemann (G); Cornejo, Fuentes, Lanaro (UC).
Arena do Gremio. Asistieron 34.187 personas.