La espera del MotoGP se acabó. La categoría vio caer su estreno en marzo de a poco. La fecha iba a firme en Losail y los equipos volaban, con todos los cuidados, hasta Qatar, pero no todos pudieron, las restricciones comenzaban. El Mundial partió, pero solo para las series Moto2 y Moto3, las máquinas mayores debían esperar. Hasta ahora.

El francés Fabio Quartararo ganó la pole de la carrera del domingo. Pero el favorito, otra vez es el campeón reinante, Marc Márquez, más aún si se considera que solo él y Valentino Rossi serán excampeones en pista. Pero lo del galo no es casualidad, pues selló en Jerez de la Frontera su tercera pole consecutiva, si se consideran las últimas dos fechas de la temporada pasada, Malasia y Valencia. Lo escoltarán ahora Maverick Viñales, Marc Márquez y, la sorpresa, Pecco Bagnaia.

Márquez tiene seis títulos de MotoGP y a los 27 años, con apenas uno más alcanzará a Rossi en la historia, a dos del mayor ganador en máximas series, Giacomo Agostini. Este año estará acompañado en el equipo oficial de Honda por su hermano menor, Álex, quien es uno de los dos debutantes (o tres, si se suma a Iker Lecuona) en la serie.

Los rivales a vencer para el actual monarca serán Andrea Dovizioso, Maverick Viñales, como en los últimos tiempos, y ahora también debe sumar a Quartararo y a Alex Rins (tuvo una caída ayer y tal vez no corra este domingo).

Bradley Smith, en tanto, tomará la moto Aprilia de Andrea Iannone en las dos primeras fechas. Después, el italiano regresará tras cumplir los 18 meses de suspensión por un positivo en un control de dopaje.

¿Y Rossi? El favorito de la hinchada enfrentará el campeonato en los comandos de una Yamaha (su casa) oficial por última vez, casi son seguridad, en su vida. A los 41 años, Il Dottore ya cerró para 2021 su llegada a Petronas, uno de los equipos privados que usan máquinas Yamaha.

“Para mí, todo lo que ha pasado estos últimos meses (la pandemia) ha cambiado los planes que tenía previstos. Quería correr algunas carreras en 2020 y ver si era competitivo y rápido, pero al final tomé la decisión sin correr, sin competir, pero he hablado mucho con Yamaha y voy a continuar”, confirmó el italiano.

Las máquinas no van a variar mucho en la temporada. Ni en 2021. Los organizadores venían planeando una baja en los costos, asunto que la pandemia por Coronavirus hizo perentoria. Dorna, la empresa dueña, implementó ayudas económicas para los equipos de Moto2, Moto3 y los privados de MotoGP. Y junto a la FIM, los equipos y constructores decidieron la congelación del desarrollo de motores hasta el final de la temporada 2021 y de la aerodinámica hasta el inicio de ese campeonato.

El Coronavirus se llevó por delante también la posibilidad de que Jorge Lorenzo corriera alguna fecha. Por limitación de personas en los circuitos, ya no habrá wild cards, por lo que el probador de Yamaha podría correr solo si baja de la moto a Rossi o Viñales.

El calendario contempla fechas dobles, es decir, dos semanas en el mismo circuito, como en la Fórmula Uno y varios otros deportes, y por ahora, solo contempla carreras en Europa, quitándole algo de glamour al “Mundial”, pero se espera que las condiciones permitan que se pueda correr en Argentina y Asia, que aún mantienen la esperanza. Otros nueve GP fueron definitivamente cancelados, entre ellos Finlandia, que volvía tras 38 años.