Lionel Messi vive uno de sus momentos más importantes desde que está en el Barcelona. El argentino llegó con 13 años al club y luego de una brillante carrera, plagada de cifras y récords únicos, su salida del equipo parece estar cerca. En 16 temporadas ha disputado 731 partidos con la camiseta azulgrana, con 634 goles y 34 títulos. Aquí, un repaso por sus momentos más brillantes con el Barcelona.

El debut goleador

Corría el minuto 86′ del partido entre Barcelona y Albacete, disputado en Camp Nou el 1 de mayo de 2005, cuando Frank Rijkaard reemplazó al camerunés Samuel Eto’o por el joven Lionel Messi, de 17 años, 10 meses y siete días. El argentino respondió de manera majestuosa a una afición que ya sabía lo que se especulaba sobre su futuro como futbolista. Messi hizo un primer tanto de globito, pero fue anulado por fuera de juego. Tres minutos después, Ronaldinho -como si se tratara de un relevo planificado- dejó solo al atacante, quien realizó la misma maniobra y esta vez su tanto sí fue válido. Así logró su primer récord; ser el jugador más joven en marcar por el Barcelona.


La primera tripleta

El primer hat-trick de la Pulga fue justamente ante el mayor rival del Barcelona, el Real Madrid. En la temporada 2006-2007, Leo impidió la derrota en Camp Nou ante el equipo merengue con un tercer tanto a dos minutos del final del partido. El resultado: un empate 3-3 y un futbolista que se consolidaba como estrella.


La inevitable comparación con Maradona

En la victoria culé 5-2 sobre el Getafe, en 2007, Lionel Messi anotó un tanto que dio la vuelta al mundo. Recibió un pase de Xavi en la mitad de la cancha y comenzó una carrera hacia el arco donde dejó a cinco rivales en el suelo más el portero. La comparación con el tanto de Diego Maradona ante Inglaterra en México 1986 fue inevitable. El gol fue elegido por los hinchas azulgrana como el mejor en la historia del club.


La rienda suelta frente al Leverkusen

Messi fue una pesadilla para el Bayer Leverkusen en los octavos de final de la Champions League de 2012. En la ida, los culés ganaron por 1-3 con dos goles de Alexis Sánchez y uno del argentino. En la vuelta se vendría lo peor para los alemanes. Un desatado Messi marcó cinco tantos en el triunfo por 7-1 en Camp Nou. Pese al nivel de juego del atacante, el Barcelona no llegó a la final del torneo, luego de caer en semifinales ante el Chelsea.


El día que sentó a Boateng

En las semifinales de la Champions de 2015, el Barcelona se enfrentó ante el Bayern Múnich. En Cataluña, Messi marcó dos golazos. Uno de ellos, el más recordado, cuando con un sutil regate dejó sentado al defensor Jerome Boateng, para luego picar el balón ante la salida de Manuel Neuer. El equipo culé llegó terminó ganando aquella Champions frente a la Juventus de Arturo Vidal.


La fiesta en la cara del Bilbao

En la final de la Copa del Rey de 2015, el Barcelona enfrentó al Athletic de Bilbao y Messi volvió a deleitar al mundo con otro golazo individual. El argentino inició una carrera por la banda derecha y en 11,4 segundos dejó en el camino a cuatro rivales para marcar. Un gol más de Messi y otro de Neymar le dieron el título al Barça.


Una demostración de poder ante la hinchada merengue

En 2017 el Real Madrid nuevamente sufrió por la categoría de Messi. En un partidazo disputado en Santiago Bernabéu, el argentino fue el protagonista de la jugada que le dio el triunfo a su equipo, con un feroz contraataque que culminó con una gran finalización por parte del atacante, quien celebró quitándose la camiseta y mostrándola al público blanco. Fue su gol 500 en el club. Messi, además, posee el récord de ser el máximo anotador en el superclásico de España, con 26 goles en 43 partidos.


La noche en que el Villamarín se rindió a sus pies

En marzo de 2019 Messi vivió uno de los momentos más especiales en España. El genio azulgrana anotó un triplete en la victoria por 1-4 ante el Real Betis en el estadio Villamarín. Ya en el último tanto del argentino, con una vaselina espectacular, la hinchada rival no pudo resistirse más y se paró inmediatamente para ovacionar al jugador. “Meeessii, Meeeessi”, coreó la barra local. “No recuerdo una ovación así”, dijo Messi después del partido.


Una ilusión frente al Liverpool

En las semifinales de la Champions League de 2018-2019, el Barcelona enfrentó al Liverpool, el equipo más fuerte del torneo. En la ida, los culés ganaron por 3-0, con un recordado tanto de tiro libre de Messi. La Pulga colocó con potencia y precisión el balón en un ángulo del arco de Alisson. La clasificación parecía segura, pero la escuadra dirigida por Jurgen Klopp se impuso por 4-0 en Anfield y luego ganó el título al superar por 0-2 al Tottenham en la final.