Las negociaciones de la U con la ANFP para resolver el ítem pendiente del retorno de Charles Aránguiz

Charles Aránguiz está a punto de transformarse en un nuevo refuerzo para Universidad de Chile. De no haber inconvenientes, el Príncipe podrá rescindir su contrato con Inter de Porto Alegre para ponerse bajo las instrucciones de Gustavo Álvarez para la segunda parte del campeonato.

El oriundo de Puente Alto llega al equipo laico en condición de jugador libre según pudo averiguar El Deportivo, por lo que Azul Azul no tendrá que pagar ni un peso a los brasileños. Así, solo falta que los gaúchos autoricen formalmente la salida del mediocampista que ya había acordado una cláusula de salida en la que ambas partes debían estar de acuerdo para hacerlo.

La espera esta condicionada por el partido entre Inter y Central por los playoffs de la Copa Sudamericana. Una vez superado este asunto, la directiva del club centrará toda su atención en la partida de Charles, por lo que en la U cuentan las horas.

Esta será una nueva alternativa para el DT azul para potenciar el mediocampo, claro que Aránguiz tendrá que ponerse a la par de sus compañeros, pues la primera parte del año fue bastante complicada para el jugador por las lesiones. No juega desde el 30 de junio, cuando disputó los últimos 19 minutos del partido contra Criciúma. Ha estado presente en 23 encuentro de 41 posibles, iniciando 15 de ellos como titular.

Mientras esto ocurre, en la U están peleando con la ANFP para poder cumplir con una de las expectativas del jugador, que es volver a utilizar la camiseta 20. Este número está siendo ocupado hasta ahora por Federico Mateos. Si bien el argentino no tiene problemas en cederle la numeración, las Bases del Torneo de Primera División 2024 establecen una traba que la U espera solucionar con la Asociación Nacional de Fútbol Profesional.

En específico, se trata del artículo 36° que habla sobre la numeración de los jugadores. Tras establecer las zonas, colores y dimensiones que deben tener tanto en el pantalón como en la camiseta, indican que “los números que se estamparen en la camiseta y pantalón de los uniformes de los jugadores deberán corresponder a aquellos informados por cada uno por el club respectivo en su Lista de Buena Fe inscrita en el sistema COMET”.

Agregan que “se debe tratar de un número único por jugador y se mantendrá durante toda la temporada”, por lo que Mateos debería seguir como poseedor del 20 hasta la conclusión de la competencia.

De hecho, solo se puede utilizar el mismo número en una misma temporada “una vez finiquitado o cedido el jugador que lo utilizaba previamente, informando mediante una carta oficial del club, firmada por el Gerente General o Deportivo, autorizando la cesión de un número a otro jugador”.

Este es un problema que no es algo nuevo con el regreso de las figuras a los equipos nacionales, pues algo similar ocurrió con Mauricio Isla al momento de fichar por Universidad Católica, donde debió disputar sus primeros encuentros con la camiseta 44. En la U, de momento, han conversado con diferentes personeros de la sede de Quilín. Han expuesto diferentes argumentos, como la importancia del retorno de un futbolista de la Generación Dorada a la liga local. Hasta ahora, sin embargo, la respuesta ha sido negativa.