Las otras leyendas que dijeron adiós al Real Madrid

Cristiano Ronaldo deja el Real Madrid. El portugués se marcha del equipo merengue y pone fin, así, a una de las etapas más gloriosas del equipo. Fueron nueve años en los que se convirtió en uno de los mejores jugadores del mundo. Multicampeón y multigoleador, se despide diciendo que "es tiempo de una nueva etapa".

El luso pasa ahora a engrosar la lista de las leyendas que alguna vez dejaron el conjunto blanco. Históricamente, eso sí, las despedidas no han sido las mejores. De Aldredo Di Stéfano a Iker Casillas, la última salida de esta envergadura.

En 2010, por ejemplo, Raúl González dejó el club por la puerta trasera. Su salida pasó a segundo plano, justamente por el arribo de Cristiano y vivió una tibia despedida con un Santiago Bernabéu a medio llenar. "Mi despedida pudo ser un poco mejor", se lamentó el histórico goleador hace algunos meses, todavía sentido por aquella situación.

Un caso similar vivió el portero Iker Casillas a fines de la temporada 2014-2015. El meta estaba siendo cuestionado por alguna parte de la afición, sobre todo por su público enfrentamiento con el entonces técnico del equipo, José Mourinho. El día de su último partido, de hecho, aún no se definía su salida al Porto, por lo que no hubo homenajes ni despedidas. Alcanzó apenas para una conferencia de prensa, a la que uno de los arqueros más relevantes de la historia del equipo acudió solo y en la que, entre lágrimas, leyó un comunicado.

Otros como el brasileño Roberto Carlos o el francés Zinedine Zidane vivieron situaciones algo más favorables. Sin la pomposidad de su talento, pero sí con mucha gratitud de los aficionados. Coincidió que ellos dejaron la actividad en el club merengue, por lo que hubo tiempo para que los hinchas les rindieran los homenajes que se ganaron en la cancha.

El adiós de CR7, por ahora, se quedó en un comunicado. En el que lo destacaron como una de las figuras más emblemáticas del equipo, uno de los mejores del mundo y ejemplo para las próximas generaciones. Pero una despedida masiva, a la altura de su contribución a la grandeza del club todavía está en veremos. Y a la luz de los antecedentes, no se vislumbra tampoco como posible.