“Las partes tuvieron un acercamiento que dio frutos”: el conflicto judicial entre Felicevich y Campos Toro llega a su fin

El Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago decretó el sobreseimiento definitivo de los agentes Fernando Felicevich y Daniel Behar, quienes habían sido querellados por su exrepresentado Matías Campos Toro, exjugador de Audax Italiano, Universidad Católica, Universidad de Chile y el Udinese.

El futbolista les reclamaba el pago de 122.000 euros (unos 112 millones de pesos). La cifra correspondía a pagos realizados por Granada, de España, y el Udinese, de Italia, donde actuó entre los años 2014 y 2017. Inicialmente, el deportista afirmaba que no había recibido tales ingresos.

Sin embargo, el exlateral izquierdo terminó desistiendo de la acción judicial que había interpuesto el 8 de julio de 2023 en el citado tribunal. “Que, luego de un acucioso y detallado estudio de los antecedentes, las partes tuvieron un acercamiento que rindió frutos, superando con ello cualquier diferencia y/o controversia que pudieron haber tenido. En ese contexto, la parte querellante se desiste expresa y totalmente de la querella interpuesta en la presente causa”, consiga el avenimiento.

En el pacto, la defensa de Felicevich y Behar, a cargo de la abogada Susana Borzutzky, acepta “incondicionalmente el desistimiento total de la querella criminal antes referida y renuncian a toda acción judicial, administrativa o de cualquier naturaleza, existente o eventual, que pudiera derivarse de la presentación de la querella”. En ese acto, ambas partes acuerdan hacerse cargo de las costas y dan finiquito a la materia que provocó la disputa.

En la presentación original, Campos Toro parecía convencido. “La mayoría de las sumas de dinero que yo debía percibir por concepto de mi trabajo como futbolista profesional las recibían ellos acá en Chile, en sus oficinas ubicadas en Avenida Vitacura 5250, oficina 1006, comuna de Vitacura”, detallaba.

“Luego me las entregaban mediante transferencia electrónica o en efectivo, todo de manera oculta. Esa era la manera en que eludían el pago de impuestos que correspondía pagar, ya que no quedaban registros”, apuntaba.

Incluso, se animó a explicar al tribunal por qué no había reclamado los referidos pagos. “Tenía un cierto temor a que me perjudicaran si los llegaba a contradecir, teniendo en cuenta que Fernando Felicevich es una persona con mucho poder dentro del fútbol chileno, de quien se dicen muchas cosas”, apuntaba.

En ese plano, a través de su cuenta en X, Felicevich desacreditó los cargos de su expupilo. “Investigar, buscar la verdad e informar es una cosa. Difamar, injuriar y hacer daño con mentiras malintencionadas es muy diferente. Y no está bien”, puntualizó.

“Por eso, frente a versiones que se refieren a querella por supuesto delito, señalo con total tranquilidad que ninguna de las amputaciones es efectiva y ejerceré todos mis derechos no solo para defenderme y demostrar la verdad, sino que también para perseguir las responsabilidades que correspondan por acusaciones falsas”, complementó. “El tiempo pondrá las cosas y a cada uno en su lugar”, sentenció.