Cristiano Ronaldo otra vez no fue suficiente para el el Al Nassr de la liga saudí volviera a celebrar. El actual equipo del delantero portugués igualó sin goles por la fecha 23 el torneo local lo que le costó perder el paso en la lucha por el título.
Así, resignado en el segundo puesto, el cuadro de Riad vio como el Al Ittihad aumentó su distancia a tres unidades tras vencer por 2-0 al Al Wehda también el domingo.
El juego del rival terminó por desatar la furia del luso que, debido a las alta precauciones defensivas mostradas por el Al Feiha, solo le permitió al atacante europeo rematar en cuatro ocasiones, uno solo al arco y otros tres desviados. Algo muy inferior a lo que supone el monto que pagó la institución por su servicios tras la salida del Manchester United.
La frustración fue tal que durante el encuentro discutió con el juez del partido y los rivales. Y una vez finalizado el encuentro Cristiano Ronaldo no quería saber nada de sus rivales e intentó retirarse lo antes posible del terreno de juego.
En este caminar se fue topando con algunos jugadores del equipo contrario que iban a saludarlo. Claro que uno de estos diálogos no fue precisamente amistoso. En su encuentro con el volante Ali Al Zaqan tuvo un mínimo intercambio de palabras. “No quieren jugar”, acusó Ronaldo mientras seguía caminando.
Lugo, tras dar algunos pasos, reaccionó a unas palabras de parte del cuerpo técnico del rival, haciendo un gesto de que cerrara la boca.
Y ahora el calendario de la Liga saudí pondrá al portugués en un nuevo desafío, pues por la jornada 24 del torneo deberán recibir al Al Hilal en un nuevo clásico donde el Al Nassr estará obligado a ganar para evitar que se extienda la distancia en la lucha por el título.