Este 27 de junio se cumplieron 29 años de uno de los días más recordados en el fútbol argentino. En esa fecha, en 1994, a Diego Maradona le cortaron las piernas, replican una y otra vez los fanáticos del Pelusa. Después de un control antidopaje aplicado en la Copa del Mundo de Estados Unidos, comenzó la caída de uno de los futbolistas más reconocidos de la Albiceleste.
Y a casi tres décadas de esto, el entonces representante del 10, Daniel Bolotnicoff, tomó la palabra para realizar una serie de revelaciones que no dejaron indiferente a nadie.
¿Cómo se produjo esta situación? La imagen hasta ahora es clara. Tras el encuentro entre Argentina y Nigeria una enfermera acudió de forma rápida hacia donde se encontraba Maradona e incluso lo tomó del brazo y lo acompañó en todo su recorrido por la cancha. La misión parecía clara: no permitir ningún instante de duda a la hora de realizar un control antidopaje que a los pocos días dio positivo.
La defensa del Pelusa estableció que Daniel Cerrini, entrenador personal del delantero, compró mal unas pastillas de venta libre que contenían efedrina, un componente que no está permitido en el fútbol.
“Sólo nosotros respaldábamos a Diego, porque la AFA estaba alineada con la FIFA”, recordó Bolotnicoff sobre la contraprueba del control antidoping realizado en Los Ángeles tal como reconoció en diálogo con Infobae.
Según detallan, a la ciudad del estado de California viajaron cuatro representantes de la AFA: Bolotnicoff, Roberto Peidró (segundo médico del plantel), Santiago Agricol de Bianchetti (abogado de la AFA) y David Pintado (dirigente de River).
Según explica el representante, la idea era “trazar una estrategia sobre qué hacer o qué dejar de hacer”, pero no pudieron lograrlo pues no tuvieron tiempo ya que el traslado de Maradona fue directo a la contraprueba “sin la posibilidad de hablar y sin un plan de la AFA ni nada”.
“En el momento de la contraprueba había un cartelito en el frasco. No parecía una irregularidad, no es que estaba adulterado, pero ese cartelito no debía estar allí. Entonces nosotros pedimos un cuarto intermedio y pensábamos mantenerlo para que fuera largo para después poder anular todo el procedimiento. Fuimos a una habitación y a los veinte minutos nos dijeron ‘vengan, no se acepta el cuarto intermedio, y esto se va a resolver ahora’”, prosiguió Bolotnicoff.
Tras ello debieron regresar a Dallas para pelear por l anulación de la prueba por lo escrito en el frasco que no debía estar allí. “Me voy a verlo a Grondona y le pido el acta de suspensión de Diego para apelarla, para meter un recurso, y ahí Grondona me dice que no, que no hay ninguna suspensión. ‘¿Cómo que no hay ninguna suspensión?’, le pregunté, y me dijo ‘no, yo lo retiré del equipo’”, todo con el fin que no fuera sancionado. “Como dijo Diego, nos cortaron las piernas a todos, porque no podíamos hacer nada”, agregó.
Por último, lanzó que Pintado no colaboró para evitar el castigo. “La AFA se alineó a la oficialidad, para decirlo con claridad. Era la AFA, la FIFA, y nosotros, tratando de defender al jugador. Terminó, evidentemente, negociando con la FIFA de que si no había discusión y lo retiraba a Diego, no pasaba nada. Evidentemente, negoció eso”, cerró Daniel Bolotnicoff.