Las tensiones que marcaron el adiós de Alexandra Benado del Ministerio del Deporte

Un adiós largamente anunciado fue el de Alexandra Benado al Ministerio del Deporte. La exfutbolista no alcanzó a completar un año en el gobierno, en el que sumó varias diferencias con distintas entidades y las relaciones con los deportistas, en general, fueron más bien distantes. Pero más allá de eso, su bajo nivel de conocimiento (apenas un 21%, la penúltima en este ítem de todo el gabinete) terminó por sepultar sus posibilidades de continuar en el gobierno de Gabriel Boric.

La ahora exsecretaria de Estado debió enfrentar diversas controversias desde el momento en que fue designada, ya que su nombre fue vinculado a supuestos malos tratos a funcionarios en su paso por la corporación Londres 38 y también a haber firmado una planilla de asistencia, pese a estar de vacaciones, cuando se desempeñaba en la Municipalidad de Providencia. “El gabinete del Presidente estaba en conocimiento de estas situaciones”, comentó a El Deportivo, semanas antes de asumir.

En su primer mes, se enfrentó al gobierno anterior debido a los retrasos en las obras de los Panamericanos y Parapanamericanos, que obligaron a la nueva administración a agilizar una serie de trámites y volver a reformular licitaciones y conseguir autorizaciones en el Consejo de Monumentos, reevaluación del Ministerio de Desarrollo Social, entre otras cosas. También este mismo retraso ocasionó que se gastarán 18 mil millones de pesos adicionales en la construcción del cuestionado Centro Acuático del Estadio Nacional.

Por otro lado, los conflictos constantes con Pablo Milad, presidente de la ANFP, fueron pan de cada día. El deseo del gobierno de modificar la actual Ley de Sociedades Anónimas Deportivas y también las opiniones de Benado en contra de las casas de apuestas en el deporte y las críticas por cómo se llevaba adelante el desarrollo del fútbol femenino profundizaron una muy fría relación con las autoridades del fútbol, la que ni siquiera se atenuó con la postulación conjunta al Mundial de 2030. En el Mindep también culpan a la poca prolijidad del ente Quilín en situaciones relacionadas con la pandemia, como por ejemplo los trámites de homologación de vacunas y también en temas de contingencia como la violencia en los estadios. “Milad ninguneó a la ministra, diciendo que no estaba informada de temas en que sí lo estaba, despreció el fútbol femenino, y nunca asumió una responsabilidad en el desastre de la violencia en los estadios”, dice un exfuncionario de la repartición.

Por otra parte, la ministra también debió enfrentar la molestia de federaciones porque todas las reuniones se llevaban a cabo solo por Ley de Lobby, una medida que se tomó debido a que era la única forma de documentar públicamente los acuerdos que se tomaban.

Otro de los temas más cuestionados hacia Benado por La Moneda fue la manera en que manejó la gestión de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos. La exministra siguió el controvertido modelo de su antecesora Cecilia Pérez y también decidió encabezar el directorio de la Corporación Santiago 2023. Sin embargo esta figura es transversalmente cuestionada debido a que, en el caso de cualquier irregularidad, el ministerio que ella encabezaba hubiese tenido que querellarse contra la persona que lideraba la corporación. Es decir, ella misma.

Importante fue el conflicto que enfrentaron con Canal 13, luego de entregarle a dedo y sin licitación los derechos de transmisión del certamen. Esto hizo que la señal de Andrónico Luksic escalara la situación a la Fiscalía Nacional Económica y a la Contraloría General de la República, lo que obligó al organismo a reconsiderar la decisión y a darle los mismos derechos a la exestación católica.

Asimismo, el gobierno ve como un activo importante el megaevento más importante y más millonario de la historia del deporte chileno y las divisiones profundas del directorio de Santiago 2023 tampoco son bien vistas. De hecho, la fría relación con el Comité Olímpico también se hizo patente durante la gestión de Benado en la mesa. Y, por otro lado, algunas quejas apuntaban a que la ministra no le daba libertad a la Corporación para trabajar.

En tanto, las federaciones acusaban que solo se enfocó su gestión en anuncios relacionados con el fútbol. “Ella trató de evadir este tema, focalizándose en el trabajo con municipios, identificando proyectos para llevarlos a cabo, en Santiago y regiones, además de avanzar en los preparativos de Santiago 2023. Desafortunadamente, la pauta deportiva en Chile es fútbol y se visualizó con más énfasis lo del Mundial, la violencia en los estadios y la separación de la ANFP de la Federación”, cuentan en su entorno.

Las rencillas con el COCh fueron varias y esto se hizo notorio en la intervención al Plan Olímpico, donde fue designado el exlanzador de bala Marco Antonio Verni en reemplazo del cuestionado Marcelo Ubal. También se sumaron Claudia Vera y Robinson Méndez, marcando la llegada de los deportistas de carrera al ministerio. Aun así, la relación entre los exponentes y Benado fue distante y nunca se consolidó.

Finalmente, la Secom siempre tuvo en la mira al equipo de la exministra. De hecho, en los últimos meses han pasado tres jefes de comunicaciones, mientras que internamente la jefa de gabinete Natalia Bravo también fue blanco de críticas, debido a su rol protagónico dentro de la estructura del Mindep, lo que es tomado como un exceso de atribuciones por federaciones y otras entidades.

Los últimos días de la ministra estuvieron marcadas por un par apariciones públicas en el contexto del Día de la Mujer. Una fue la inauguración de la sala de lactancia de Santiago 2023 y el otro fue la visita a la Comisión de Educación, Cultura y Deporte del Senado para ingresar las indicaciones del Ejecutivo que modifican el protocolo de denuncias por acoso o abuso sexual, discriminación y maltrato en actividades deportivas. Mientras que la tercera aparición pública se iba a producir este viernes en un recorrido por las obras del Estadio Nacional, donde estaba contemplada una visita técnica al Polideportivo de Deportes de Contacto. Sin embargo, esa pauta fue cancelada el jueves en la mañana, anticipando el final del ciclo de Alexandra Benado.