Martín Lasarte (57 años) está atento al Mundial. De alguna manera, el duelo de mañana entre Uruguay y Francia lo señala. Y no solo por ser de Montevideo, sino porque las estrellas de ambos equipos partieron con él. Fue Machete quien hizo debutar a Luis Suárez, en Nacional, en 2005, y también quien tiró de Antoine Griezmann, en la Real Sociedad, en 2009. El entrenador se abre a recordar anécdotas.
¿Sorprendido con Uruguay?
No, no es una sorpresa. La historia de Uruguay es muy rica. Ha sido campeón del mundo y ha estado varias veces entre los cuatro mejores. Es cierto que mucha gente se queda con la parte mala que tocó vivir en algún tramo de la historia, pero Uruguay siempre ha sido protagonista. Hace tiempo que estamos peleando cada cosa que jugamos, más allá de lo difícil que se nos hace por diferentes circunstancias. No se puede olvidar que somos un pueblo chico.
¿Quién es el jugador clave de este equipo?
Diego Godín, por lejos. Y eso se nota.
¿En qué lo nota?
En todo. En cómo pelea un balón dividido, en cómo ordena al equipo. Sé como es Diego, porque lo tuve como jugador. Sé lo que marca en cada equipo que está, lo fuerte que es en el juego aéreo. Lo que genera Godín es fundamental. Su juego da una tranquilidad tremenda a los mediocampistas. Todos confían en él.
¿Qué balance hace de la dupla Suárez-Cavani?
Una dupla muy buena. Es un privilegio decir que tenemos al nueve del Barcelona y al nueve del PSG. Hay que disfrutar, porque no queda mucho. No pueden durar para siempre.
Hizo debutar a Suárez. ¿Lo recuerda?
Sus primeros partidos fueron complicados. Le costó marcar y la gente, o más bien una parte de Nacional, le reprochaba mucho. Él estaba inquieto. Lo aguanté, porque sabía que metería un gol y no pararía más. Y así fue. Es un jugador extraordinario, tiene unos valores tremendos y siempre está peleando por sus ideales.
¿La personalidad de Suárez siempre lo marcó?
Su personalidad es clave. Siempre ha sido igual, siempre ha tenido ese apetito que lo lleva a querer anotar en todos los encuentros. Si no anotaba, se enojaba. Tenía una potencia física por sobre la media.
¿Pensó que se convertiría en estrella mundial?
Es difícil imaginar eso. Uno le veía cualidades, pero era muy pequeño en ese momento.
Y en su paso por Real Sociedad también hace debutar a Griezmann.
Sí. Era un chico que tomaba muy buenas decisiones, tenía una pierna izquierda exquisita y defendía muy bien cuando nos atacaban. Jugaba por la banda izquierda y con el pasar del tiempo viró a la delantera.
¿Usted tuvo un rol especial en la formación del francés?
Sí. Los papás estaban lejos y a veces le costaba asumir esa soledad. Era un muchacho de 18 años y estaba solo. Nuestra obligación era protegerlo y lo hicimos. Yo vigilaba que comiera bien, que descansara las horas pertinentes. Al final uno nunca sabe si te cumplen, pero en líneas generales era un tipo bien responsable. Otro que fue clave en la formación de Griezmann fue Claudio Bravo. También lo protegía mucho y lo cuidaba. Griezmann fue el gran proyecto del club.
¿Llega mejor Suárez o Griezmann?
Cada uno llega con lo suyo, en un gran momento. Será un partido de trámite incierto, porque son dos equipos que tienen gran calidad individual y colectiva.
¿La ausencia de Cavani puede marcar el duelo?
La ausencia de Cavani puede resultar clave y claro que es una desventaja, pero Uruguay se centra más en lo colectivo.
¿Su favorito?
Cualquiera de los ocho puede ser campeón. Ya se demostró que no hay rival que no pueda complicarte. No se sabe. El otro partido que estará bueno es el de Bélgica y Brasil.
¿Qué le ha parecido la actuación sudamericana?
Colombia tuvo mala suerte. Le faltó James, por lejos su mejor jugador. Me dio una pena tremenda la eliminación. Perú podría haber seguido; lo que le vi, jugó muy bien. No diría que Perú fue una decepción. El más bajito fue Argentina.
¿Le sorprendió el bajo nivel de la Albiceleste?
Creo que lo de Argentina pasa por otro tipo de problemas, otro tipo de conflictos, pero no quiero hablar de eso. Ellos lo tendrán que solucionar.