Un partido extraño, que no dejó mucho espacio a las explicaciones técnicas. Ese fue el talante de las palabras del técnico de Chile, Martín Lasarte, para analizar la histórica derrota ante Ecuador, en Santiago.
“Jugué 18 años y hace mucho que dirijo, no recuerdo un partido así con una expulsión temprana, que se lesionen dos jugadores importantes, otro que termine muy mal. Pero, a ver, Ecuador es un buen equipo, por algo tiene los puntos que tiene. Se nos sumaron muchas cosas, no conseguimos remontar y al final nos desprotegimos. No importa lo que te prepares, no habrá un partido como este”, dijo Machete con evidente resignación.
Consultado sobre las ausencias, al margen de los lesionados, el DT insitió que “hablar de variantes y de ausencias es como una excusa. Pero hay que ser justos, ni tan calvo ni con dos pelucas. Es difícil jugar sin Pulgar, sin Aránguiz, sin Brereton y sin Luis Jiménez; aparte de todos los avatares que tuvimos, es complicado. Así todo quiero quebrar una lanza por un montón de jóvenes que piden lugar. Eso es bueno. Quedan minutos, no partidos”.
Sobre la decisión de los cambios, el uruguayo aclaró que “hicimos cambios que no pensábamos que haríamos, para dejar en cabina otros más importantes. Dos por lesión, alguno por cansancio como Baeza. Un montón de circunstancias y accidentes del partido que te obligan y te dejan mal parado. Había jugadores que debían mantenerse en cancha como Medel, por el espíritu de lo que nos quedaba. Tal vez podríamos haber puesto otro volante”.
Jugar en Calama
Uno de los temas subyacentes en la realidad actual de la Roja es la opción de jugar el próximo duelo eliminatorio ante Argentina en Calama. Una situación que no quiso definir Lasarte en la conferencia de prensa.
“Estamos todavía masticando un partido extraño, extrañísimo digo yo. No podría cuáles son nuestras posibilidades de donde jugar. No puedo dar alguna aseveración al respecto. Veremos qué es lo más beneficioso para nosotros”, dijo el DT.
Además, destacó el trabajo de los jugadores que ingresaron, sobre todo por que “todos los jóvenes que entraron estuvieron a la altura. No es fácil en un partido con estas características. Hay que darles, por lo menos, un aprobado, porque muchos fueron llamados a último momento”.
Incluso enfatizó en el ingreso de Montecinos, ya que “Joaquín entró muy bien y le dio más alas a nuestro juego. Entró muy bien con dos o tres carreras al principio. Pero el equipo estaba cansado, con fatigas que no te dejan tomar buenas decisiones”.