Jannik Sinner (3º ATP) consiguió sumar un segundo Master 1000 a su palmarés luego del logrado en Toronto el año pasado. Venció a Grigor Dimitrov (12º ATP) en la final del Abierto de Miami, por parciales de 6-3 y 6-1, en una hora y 15 minutos.
Ambos alcanzaron dicha instancia con muchos méritos propios. El italiano venía de literalmente pasarle por encima a Daniil Medvedev en semifinales, campeón defensor del torneo. Mientras que el búlgaro eliminó en cuartos de final al principal cabeza de serie y favorito de muchos, Carlos Alcaraz (2º ATP). En semifinales batalló por más de dos horas y media para dejar atrás a Alexander Zverev (5º ATP).
Fue un verdadero choque de estilos en la cancha dura del Hard Rock Stadium. Dimitrov trajo de vuelta al top ten el revés de una mano (que al menos estéticamente hace recordar al de Roger Federer). En tanto, Sinner es reconocido por su velocidad y no dar ninguna pelota por perdida, obligando siempre al rival a jugar una pelota más, aún cuando este domine claramente el punto.
El primer quiebre del partido se dio cuando Dimitrov sacaba 2-2. El búlgaro había comenzado muy bien con su servicio, sin embargo, bastaron unos cuantos descuidos y el italiano no perdonó haciendo estériles sus intentos por cerrar los puntos en la red. Con un sólido y variado juego juego de saque (dos abiertos, uno al cuerpo y otro a la T), el nacido en San Candido confirmó el quiebre y se puso 4-2 arriba, tras salvar un punto de quiebre en el game anterior.
Con un notable passing shot de revés, el tercero del orbe mundial volvió a quebrar para ponerse 6-3 y quedarse con el primer parcial en 46 minutos. La efectividad del italiano estuvo marcada principalmente porque supo dar con las debilidades de Dimitrov. Cada vez que estuvo en peligro de quiebre, los saques potentes al cuerpo le dieron siempre un muy buen resultado. También porque tuvo un 100% de precisión con el primer servicio.
Una paliza
En la segunda manga se hizo presente el cansancio en las piernas del nacido en Jaskovo y le costaba cada vez más mantener el ritmo ante los embates de Jannik. Tanto así, que en apenas 23 minutos ya se encontraba 4-1 abajo.
Finalmente el 12º del mundo no pudo evitar lo inevitable y cayó en la segunda manga por 6-1 en poco más de media hora, fracasando en su intento por conseguir su segundo Masters 1000.
El partido pasó principalmente por dos puntos importantes. Las devoluciones de revés por parte de Grigor Dimitrov que tanto éxito le dieron ante Alcaraz y Zverev, no funcionaron ante un Sinner muy concentrado. ¿El otro? Previo a este partido había ganado 60 de 63 juegos de saque, lo que habla de la fragilidad que mostró ante las devoluciones del italiano.
A pesar de la apabullante victoria de Jannik Sinner, ambos sacan cuentas alegres. El italiano sobrepasa a Carlos Alcaraz y alcanza por primera vez en su carrera el segundo puesto del ranking mundial. En tanto, Dimitrov este lunes aparecerá en el noveno puesto y vuelve al top ten luego de seis años.