En la madrugada del jueves, Braulio Leal comenzó a sufrir convulsiones. La alarma era elocuente. El futbolista azotó su cara contra el césped en el partido en que San Luis enfrentó a Universidad Católica, el 5 de noviembre, lo que le significó salir del partido con un profundo corte en el labio. Las consecuencias reales, sin embargo, demoraron varios días en manifestarse y fueron mucho mayores.
Ayer, el jugador fue sometido a un procedimiento quirúrgico en la clínica Santa María. Se le detectó una malformación vascular venosa intracraneal (MAV), que obligó a practicarle una embolización endoscópica. "Le pusieron un catéter por vía inguinal para cerrar algunos de los afluentes de sangre", explicó a La Tercera Reinaldo Traipe, jefe del cuerpo médico del club quillotano.
Según los libros de medicina, la embolización "consiste en tratar la MAV mediante el cierre del flujo arterial para minimizar la pérdida de sangre". En términos prácticos, el cirujano dirige un catéter a través de la red arterial hasta que alcance el sitio de la MAV. Posteriormente, se inyecta una sustancia que corrige el patrón anormal en el flujo sanguíneo (ver infografía abajo).
Traipe prefiere ser optimista respecto de la evolución del jugador, aunque cauteloso en cuanto a los plazos. La rehabilitación del cuadro requiere sesiones intercaladas cada tres meses, por lo que la recuperación de Leal podría tardar hasta un año. A pesar de esto la proyección clínica indicó que el mediocampista no tendría impedimentos para volver al balompié profesional, pero la traba estaría dada por su avanzada edad, tratándose de un deportista de elite: 36 años.
Las MAV son defectos poco comunes del sistema vascular que ocurren generalmente en la etapa embrionaria o fetal. "A Braulio se le efectuaron estudios que arrojaron que esta situación es de carácter congénito", ratifica el médico Traipe.
La inquietud fluyó en forma natural. Manuel Gahona, presidente del club canario, dice que se actuó de forma preventiva. "La intervención es para que el problema no pase a mayores. Presentó convulsiones, estuvo en observación y se adoptó esta decisión, porque todos coincidimos en que lo mejor para él es evitar complicaciones futuras", sostiene el timonel del cuadro canario.
Los especialistas en la materia consignan que la mayoría de las personas que sufren estas malformaciones no presenta signos en toda su vida. A lo sumo, un leve dolor de cabeza, por lo que detectarlos resulta complejo. Sin embargo, también se han dado casos en que las MAV se han manifestado de forma más violenta, a través de hemorragia o crisis epilépticas.
Apenas se conocieron el diagnóstico y la cirugía de Leal, la reacción fue inmediata. El nombre del volante se transformó momentáneamente en el tema más comentado en Twitter. Algunos de los clubes en los que militó el futbolista, como Unión Española y Audax Italiano, publicaron mensajes de apoyo. También lo hicieron el Sifup y varios compañeros y rivales con los que Leal ha compartido durante su carrera. Algunos hinchas llamaron a realizar cadenas de oración para contribuir desde el plano espiritual a la recuperación del jugador quillotano.