Charles Aránguiz, recién recuperado de una distensión en el gemelo, sólo miró desde la banca el triunfo del Bayer Leverkusen ante el Borussia Mönchengladbach por los octavos de final de la Copa de Alemania (0-1).
En un partido que tuvo ocasiones de gol en ambos arcos, los rojos lograron sacar ventaja recién en el segundo tiempo a través del jamaicano Leon Bailey (70'), quien quedó mano a mano con el arquero, gracias a una descoordinación en la zaga local, y definió al primer palo.
Este, además, fue el último partido del Leverkusen en 2017. El 12 de enero volverá la Bundesliga, con Aránguiz ya disponible para ser titular.