Lionel Messi luchó con todo hasta alcanzar su objetivo en el Mundial de Qatar 2022. Liderando a la selección de Argentina, consiguió levantar el trofeo tras vencer a Francia en una espectacular final, aunque en el camino a ella registró algunos momentos que sacaron a relucir su lado sudamericano.
Una de esas instancias se dio en el duelo por los cuartos de final contra Países Bajos. Tras unos tensos momentos sobre la cancha y el triunfo en la definición a penales, el actual jugador del PSG tuvo un momento donde se desbordó.
Ocurrió en la zona mixta donde se dio uno de los diálogos más recordados de la Copa. Cuando se encontraba dialogando con TYC Sports, encaró a Wout Weghorst. “¿Qué mirás bobo?”, dice en dos ocasiones. “Andá para allá, bobo”.
Claro que ahora con más calma, Messi ha dejado en claro que esto es una de las cosas que se arrepiente debido al alcance que tuvo. Así lo comentó en una entrevista concedida al programa Perros de la Calle de la emisora Urbana Play.
“No lo pensé, salió en el momento. Sí que sabía todo lo que habían comentado antes del partido, lo que él (Van Gaal) había comentado. Incluso algunos de mis compañeros me decían ‘Viste lo que dijo’, a propósito. Y bueno, cuando termina todo eso no me gusta eso que hice, no me gusta el ‘andá para allá’ y todo eso. Pero bueno, son momentos de mucha tensión, de mucho nerviosismo y pasa todo muy rápido”, explicó Leo.
“Uno reacciona como reacciona, pero no estaba nada pensado. Se fue dando. No me gusta dejar esa imagen pero son cosas que pasan también”, añadió.
Además, ha señalado que no ha visto otra vez el partido y explicó como sintió a Diego Maradona en el momento. “Vi resúmenes, jugadas, festejos de la gente cuando somos campeones del mundo, pero la final en sí, los 90 minutos, no los volví a ver”, expresó.
En cuanto al Pelusa, sostuvo que “me hubiese gustado que, si no me entregaba la Copa, al menos vea todo esto. Creo que desde arriba, tanto él como mucha gente que me quiere hacía fuerza, no solo para esto sino para todo en general”.
Por otro lado, confesó cuáles fueron sus sensaciones al momento de besar el trofeo del Mundial tras ser reconocido como el mejor jugador de la Copa. “La vi ahí y no podía no hacer lo que hice. La Copa me llamaba. Me decía ‘Ya está, vení y agarrame que ahora sí la podés tocar’. La veía ahí que brillaba, que sobresaltaba en ese estadio hermoso y no lo pensé, la fui a besar porque pasé por al lado. Lo necesitaba”.
Messi también mostró el lado más familiar al señalar cómo vivió este momento acompañado por su familia. “Fue un mes increíble para mí y mi familia. Thiago estaba enloquecido. Ver cómo disfrutaba, cómo lo sentía, cómo sufría... porque después del partido con Países Bajos lloraba. O Mateo haciendo cuentas después del partido que perdimos contra Arabia. Ciro es el que menos entiende, pero los otros dos lo vivieron como hinchas. Sufriendo, viviéndolo al máximo, disfrutándolo. Incluso cuando volvimos a París extrañábamos los días en Qatar. La pasamos muy bien”, aseguró.