En un empate sin goles terminó el clásico disputado este domingo entre Liverpool y Manchester United, cotejo correspondiente a la jornada 17 de la Premier League de Inglaterra.
El encuentro comenzó con un dominio absoluto de los locales en Anfield, haciendo que los visitantes se replegaran en su campo durante gran parte del primer tiempo. Prueba de ello es que los dirigidos por Jürgen Klopp tuvieron una posesión del balón del 67 porciento contra un 33 de su rival; asimismo, remataron 15 veces (tres a puerta) versus apenas dos (ninguno al arco) de su oponente.
Sin embargo, pese a la evidente superioridad, recién en el minuto 29 los Reds pudieron abrir la cuenta con un cabezazo de Virgil van Dijk tras un lanzamiento de esquina, pero el balón fue desviado por el arquero André Onana.
Ya sobre el final, en el 42´, un disparo de Mohamed Salah se fue directo a las manos del portero camerunés. Esa sería la última chance de la primera fracción, por lo que los elencos se fueron al descanso con el marcador en blanco.
En el complemento se mantuvo la tónica de la etapa inicial, con Liverpool siendo dueño del balón y volcando el juego sobre el campo rival.
En ese sentido, la primera ocasión de los Reds fue en el minuto 63 con un nuevo remate del delantero egipcio que fue atrapado con facilidad por Onana. Tras ello, en el 66′, Trent Alexander-Arnold tuvo la oportunidad más clara del cotejo, con un disparo ajustado que se fue rozando el poste izquierdo.
Con Liverpool volcado en ofensiva, Manchester United solo respondió con un contraataque comandado por Rasmus Hojlund (68′), pero el portero Alisson Becker estuvo atento para achicar y rechazar el balón.
Los dirigidos de Klopp volvieron a generar una ocasión clara a través de Ibrahima Konaté (77′), pero el tiro al arco del francés fue contenido sin problemas por el guardameta forastero.
En los minutos postreros del partido Liverpool acorraló a Manchester United pero, pese a los intentos, no logró vulnerar el bloque defensivo de los mancunianos.
Con este resultado, Liverpool sumó 38 puntos y se ubica en el segundo lugar de la clasificación, a solo una unidad del líder Arsenal (39). Por su parte, los Diablos Rojos llegaron a los 28 positivos en la séptima plaza de la tabla.
En la próxima fecha los Reds volverán a ser dueños de casa, recibiendo precisamente a los Gunners. En tanto los pupilos de Erik ten Hag nuevamente serán visitantes, esta vez frente al West Ham.