Se hizo larga la espera, hasta que finalmente el fútbol chileno está de regreso. Pasaron 69 días para el retorno del campeonato de Primera División (este viernes jugaron Ñublense y Coquimbo Unido), que tiene como el campeón vigente a Huachipato, que se coronó en la última jornada de la liga 2023, ganándole la definición a un Cobresal que se quedó a las puertas de hacer historia por segunda vez. Los acereros bajaron la tercera estrella y consiguieron algo que no sucedía desde 2001 (con el Wanderers de Jorge Garcés): que un club de provincia ganara un torneo largo de dos ruedas.
Con todos sus bemoles, sus carencias y particularidades, más el sustancial añadido del problema de la seguridad (tres partidos suspendidos en la primera fecha), la competencia vuelve y reflotan las expectativas de poder ver lo mejor de lo nuestro (en la medida de lo posible). Bueno, eso es lo que el hincha y el ambiente espera, pese a los indicadores que reflejan el mal pie de la actividad. Un ejemplo: el ranking de ligas 2023 de la Federación Internacional de Historia y Estadísticas lo ubica en el 37° puesto, siendo el octavo de la Conmebol. O sea, solo supera en el continente a Bolivia (61°) y Venezuela (66°).
Éste es el torneo de los grandes retornos. El desembarco de Arturo Vidal en Colo Colo se une a los regresos de otros ilustres de los elencos tradicionales: Marcelo Díaz en la U, Nicolás Castillo en Católica, Carlos Villanueva en Audax Italiano y Emiliano Vecchio en Unión Española.
Pero si de clubes se trata, éste es el torneo del retorno a la división de honor de un grande: Cobreloa. Calama vuelve a ser de Primera luego del título conseguido en el Ascenso 2023, en Talca. Se acabó la travesía por el desierto (literalmente) de los loínos y tendrá su reestreno en la máxima categoría ante Huachipato, este domingo, en el choque de los campeones.
También es el torneo de los argentinos. Son la legión extranjera más numerosa de la liga, con distancia. Revisando a los 16 clubes, hasta el cierre de esta nota, el 75% de los foráneos son transandinos, siguiendo una tendencia ya arraigada en nuestro balompié. En cuatro clubes, el 100% de sus extranjeros provienen desde Argentina: Coquimbo Unido, Unión La Calera, O’Higgins y Audax Italiano.
Técnicos y jugadores
Donde se marca una paridad dice relación con los entrenadores. Si para el inicio de la liga 2023 había una supremacía de foráneos en Primera (10 de los 16 totales), ahora esa distancia se estrechó.
Ocho de 16 son argentinos: Javier Sanguinetti (Huachipato), Jorge Almirón (Colo Colo), Pablo Sánchez (Palestino), Francisco Meneghini (Everton), Manuel Fernández (La Calera), Gustavo Álvarez (U. de Chile), Juan Manuel Azconzábal (O’Higgins) y Walter Erviti (Audax).
El otro 50% son chilenos: Gustavo Huerta (Cobresal), Fernando Díaz (Coquimbo), Nicolás Núñez (UC), Miguel Ponce (Unión Española), Mario Salas (Ñublense), Ivo Basay (Copiapó), Emiliano Astorga (Cobreloa) y Miguel Ramírez (Iquique). Desde 2021 que no se daba este 50-50 al inicio del torneo.
En el marco de un mercado de pases austero y de impacto relativo, Unión La Calera movió el tablero casi por completo. Los cementeros están acostumbrados a grandes cambios de un año a otro. Ahora no fue la excepción, siendo el equipo con más incorporaciones hasta la fecha: 15 jugadores nuevos. La potente legión argentina tiene exponentes de peso. Uno es Emmanuel Gigliotti. El ‘Puma’, de 36 años, es uno de los que desembarca en Chile con mayor currículum en el lomo. Cuenta con pasos por Boca Juniors, Independiente, Toluca y Nacional de Uruguay, entre otros. Tiene como compañero a Gabriel Hauche, conocido como el ‘Demonio’, ex Racing, otro experimentado que desembarca en Chile en la última etapa de su carrera.
Varios nombres de peso, de Primera División argentina, llegan al torneo criollo con cierta obligación de demostrar su trayectoria y con el factor común de haber usado la pesada camiseta de Boca. Tal como Gigliotti, La Calera sumó a Franco Soldano, otro atacante con pasado xeneize. Unión Española hizo lo propio con Diego ‘Pulpo’ González y Coquimbo Unido se reforzó con Andrés Chavez, quien llega para ocupar el lugar que dejó Rodrigo Holgado.
En cantidad de fichajes, luego de los caleranos viene Ñublense, con 13 caras nuevas. La más notoria es la de Emanuel Herrera, quien retorna al fútbol local luego de sus fructíferas etapas en Deportes Concepción y Unión Española. Le siguen Cobreloa, con 12; Everton e Iquique, con 11.
En otro ítem de análisis, la plantilla más veterana la tiene Copiapó, con un promedio de edad de 27,9 años. Ivo Basay mantiene una importante base del equipo que mantuvo la categoría. Después aparecen la UC e Iquique, con 27 años. Lo contrario sucede con Huachipato, el plantel más joven: 24,4 años promedio.