Lo bueno, lo malo y lo feo que dejó nuestro primer fin de semana de fútbol

Y volvió nuestro torneo. Justo en un fin de semana donde todo Chile estaba en cuarentena. Por lo que el planeta fútbol estaba más atento que nunca a lo que pasaba en las canchas del país y -hay que decirlo- el campeonato no decepcionó.

Hubo partidazos, goleadas, estrenos, duelos, llantos, agresiones y chambonadas. Todas resumidas en el viejo y conocido “lo bueno, lo malo y lo feo” y al más puro estilo de El Deportivo.

Dicen que a quien madruga, Dios lo ayuda. Y si bien, el horario de Palestino-Antofagasta no cumplía con este requisito, comenzó a las 10:45 de la mañana, despertar un domingo a esa hora fue todo un sacrificio para algunos.

Sin embargo, árabes y pumas jugaron uno de los mejores encuentros de la fecha, entregaron la primera goleada (terminó 4-2 en favor de la visita), el blooper de Luis Jiménez y el renacer de un apellido histórico.

Los nortinos jugaron un gran primer tiempo y se les facilitaron las cosas, cuando los santiaguinos se perdieron un penal. Todo ocurrió a los cinco minutos de juego, cuando lo locales ya caían por la mínima y tuvieron la oportunidad de un tiro desde los doce pasos. Luis Jiménez, uno que no falla nunca, tomó la pelota y cuando le iba a pegar, resbala y manda el balón a las nubes.

Pero lo que no pudo hacer el seleccionado chileno, lo logró Bruno Barticciotto. El hijo del ídolo colocolino debutó en Primera con un gol y una asistencia y si bien no le sirvió para evitar la derrota de su equipo, el formado en Universidad Catolica hizo que albos, cruzados y tricolores suspiraran de emoción.

Otras de las cosas buenas que pudimos ver fue el duelo de técnicos que hubo entre Jorge Pellicer (Unión Española) y Ronald Fuentes (Wanderers), la calidad intacta que mostró Julio Barroso y la supremacía que los cruzados mantienen hace 52 fechas en esta parte del mundo.

Subieron este año a Primera y sus hinchas esperaban con ansias su estreno. Pero Melipilla y Ñublense cayeron derrotados (ante Curicó y Universidad Católica)y demostraron que aún le faltan algunos ajustes si quieren dar pelea en la categoría de honor.

Y nótese que decimos “algunos ajustes”, pues el fútbol brindado por metropolitanos y sureños fue de buen toque en algunos pasajes y sólo les faltó concretar las ocasiones que se crearon. Por lo que, no hay que decepcionarse aún.

Mas malo aún estuvo el estado del campo de juego de La Granja. Si en el extranjero veían el inicio de la temporada en Chile, perfectamente pensaban que se estaba jugando un partido amateur por lo pésima que se encontraba la cancha tortera. Es ahí donde debe intervenir la ANFP, pues si el estado les hizo los estadios y las municipalidades lo mantienen, mínimo que las sociedades anónimas se preocupen del gramado... ¿o no?

Aquí no hubo discusión en el equipo creativo de esta nota: lo más feo de la fecha fue el codazo de Ariel Martínez a César Fuentes en el partido entre Colo Colo y La Calera. Y si bien, el formado en el Cacique -¡vaya ironía!- aseguró que “nunca” quiso pegarle al volante albo, Fuentes será operado este martes para superar la fractura nasal que le provocaron.

Otra cosa fea que se vivió en ese mismo partido, fue la definición que intentó Ivan Morales en la más clara que tuvo en el partido. No se supo si la quiso levantar, si se agrandó, si le iba a pegar, lo cierto es que Morales no demuestra que es un jugador para el Popular.

Claro que más fea es la administración de Blanco y Negro: No puede ser que otra vez, sobre todo después de lo vivido en el campeonato anterior, el plantel no esté completo antes de iniciar la competencia y que más encima, el técnico -Gustavo Quinteros- se los enrostre cada vez que tiene un micrófono cerca.