Los barrabravas apagan Coquimbo

El fútbol chileno nuevamente es sobrepasado por la violencia. Nuevamente se interrumpe un partido por la intervención de los barrabravas en las canchas. Las amenazas se concretaron, en el contexto del esclarecimiento de la muerte de Jorge Mora, hincha de Colo Colo, atropellado por un camión de Carabineros. El duelo entre Coquimbo Unido y Audax Italiano se quebró en el minuto 17.

No había goles en el Sánchez Rumoroso, hasta que un grupo de, aproximadamente, 40 radicales se meten al campo y paran el juego. Lienzo en mano, pregonan que el fútbol no puede desarrollarse sin justicia. Agredieron a reporteros gráficos y a camarógrafos del CDF. Destruyeron cámaras de la transmisión oficial y el tótem del VAR. Mientras eso sucedía, los jugadores miraban, con la incertidumbre propia de hechos de esta naturaleza. Los guardias de amarillo igualmente solo contemplaban la escena.

El público apostado en otros sectores del recinto observaban con incredulidad. Reaccionaron con molestia y gritaban en contra de los vándalos. Incluso, niños lloraban. El partido quedó interrumpido y el árbitro Cristián Droguett lo suspendió definitivamente más de una hora después. "Está en riesgo la seguridad de los jugadores", argumentó.

"Lo que está pasando se está tomando el fútbol. Si sucede algo malo está bueno reprocharlo, pero hay maneras. Perdemos todos los que estamos dentro", dijo el técnico pirata, Germán Corengia, tras el juego.

Previamente, el gobernador de la Provincia del Elqui, Gonzalo Chacón, había garantizado la seguridad del evento: "Estamos preparados con un contingente especial, que va a aumentar. También va a haber una malla perimetral de acceso más amplia y vamos a hacer una revisión previa exhaustiva al interior". Pasaron 40 minutos desde la invasión para que un piquete de FF.EE. fuese a la cabecera norte, sector donde se ubica la barrabrava coquimbana, cuando las redes de los arcos eran retiradas y ya no había gente.

El Sifup rechazó lo sucedido. "Destruir, romper, agredir a los trabajadores del fútbol no reivindica nada. Los jugadores y su gente apoyan toda manifestación social, pero jamás avalarán hechos como éste", manifestaron.

Ya durante la noche, el presidente de la ANFP, Sebastián Moreno, declaró en Quilín: "Aquí hay delincuencia. No aceptamos ningún acto de violencia dentro de una cancha. La idea fue dilatar y tomar control de parte de Carabineros. Pasó un tiempo más que prudente... Posterior a eso, no existió la disposición para reanudar", dijo. El duelo quedó diferido para más adelante. No se pudo reprogramar para el sábado.

Otro desafío de seguridad para la Región de Coquimbo será este martes, con el debut de los aurinegros en la Copa Sudamericana, recibiendo al Aragua de Venezuela.

El riesgo de nuevas manifestaciones es latente. El foco está puesto para el partido entre la U y Curicó. Una facción de la barra de los azules, Los de Abajo Antifa, llamó a no entrar al Nacional y a desarrollar una manifestación en el exterior del recinto. Por razones de seguridad, el duelo fue adelantado para que concluya con luz natural.

Revisa las imágenes:

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Foto: Agencia Uno.[/caption]

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Foto: Photosport.[/caption]

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Foto: Agencia Uno.[/caption]