Los continuos tropiezos de una potencia mundial: Brasil, el próximo escollo de la Roja, y un lustro para el olvido

Brasil es sinónimo de fútbol. Es hablar de los pentacampeones del mundo, de una nación que vive y respira alrededor de una pelota, siendo una factoría interminable de talentos. Pero aunque su rica historia avala su condición de potencia mundial, el momento que atraviesa la selección del gigante sudamericano no es el más favorable. Y en paralelo, su némesis deportivo, Argentina, cuenta con un panorama completamente distinto, con éxitos reiterados. La escuadra que dirige Dorival Júnior será el siguiente escollo de la Roja, este jueves, en el Estadio Nacional.

Puede llegar a ser sorpresivo, considerando el peso específico de Brasil en el panorama futbolístico internacional, sin embargo la Canarinha va de tropiezo en tropiezo de un tiempo a esta parte. En rigor, se puede definir como un lustro este periodo de sinsabores. Desde la Copa América 2019, en la que fue el anfitrión, que el seleccionado adulto no gana un título. En aquella ocasión, el Brasil de Tite derrotó en la final a Perú, que dirigía precisamente Ricardo Gareca. Este es el camino de los complicados últimos cinco años del Scratch.

Son distintas situaciones, tanto deportivas como administrativas, las que han construido un lapso duro para el combinado absoluto y para la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF). Una herida profunda fue caer en la final de la Copa América 2021, en pandemia, ante Argentina en el Maracaná. Con el rol de favorito, el equipo comandado por Neymar no pudo retener la corona. A la larga, ese fue el inicio de la ‘Scaloneta’, que llegó a su clímax siendo campeón del mundo.

Pasó un año y llegó otro sonoro tropezón: la eliminación en los cuartos de final del Mundial de Qatar. Quedar en el camino en tanda de penales, con Croacia, fue duro para el Scratch, que llegó a la cita planetaria con el cartel de candidato. Terminó siendo el final de la estadía de Tite al mando de la selección, luego de seis años. El cambio de entrenador le significó un intenso dolor de cabeza a la CBF, porque apuntaron alto y fracasaron en el intento.

El deseo era Carlo Ancelotti. Incluso, varios medios locales lo daban por hecho (hasta que iba a dirigir en la Copa América de USA). La Confederación lo esperó y Fernando Diniz, quien estaba en Fluminense, asumió como interino para el inicio de las Eliminatorias 2026. Lo de Carletto quedó solo en una intención, porque en definitiva no se movió del Real Madrid. Terminó siendo un papelón de la directiva.

El principal impulsor de la opción de fichar a Ancelotti fue Ednaldo Rodrigues, presidente de la CBF, actor de otro escándalo que casi termina con Brasil borrado de cualquier torneo. A fines del año pasado, la FIFA amenazó con excluir de todas las competiciones internacionales tanto a la selección como a los clubes brasileños, luego de que el Tribunal de Justicia de Río de Janeiro destituyera a Rodrigues, por irregularidades en su gestión. En enero de 2024, la Corte Suprema le devolvió el cargo al dirigente, argumentando que su cese podía provocar “perjuicios considerables al fútbol nacional”.

Hoy por hoy, la selección brasileña aparece en el quinto lugar de las Eliminatorias, con 10 puntos, en zona de clasificación. Pero para una potencia como el Scratch no es suficiente. El proceso rumbo al Mundial 2026 ha entregado una serie de hitos estadísticos preocupantes que entraron en sus libros. Por ejemplo, perdió con Uruguay por primera vez en 22 años (2-0, en Montevideo). Además, cayó de manera inédita en Clasificatorias con Colombia (2-1). Aún más doloroso fue haber caído con Argentina en el Maracaná (0-1, en noviembre de 2023), perdiendo el invicto histórico que tenía Brasil como local en Eliminatorias. Nunca la Verdeamarela había perdido tres partidos seguidos en una clasificatoria mundialista.

En octubre de 2023, en la derrota ante la Celeste de Bielsa, fue el último partido de Neymar. El ex PSG y actual jugador de Al Hilal sufrió una grave lesión (rotura del ligamento cruzado anterior y menisco de la pierna izquierda), que lo ha dejado fuera de actividad hasta el día de hoy. La gran carta ofensiva de los últimos años lleva un año fuera. Las dudas se propagaron a las categorías juveniles, donde Brasil siempre se erige en un cuadro poderoso. En el último Mundial Sub 20 (Argentina 2023) fue eliminado en cuartos a manos de Israel. Mientras que en el Sub 17 (Indonesia 2023), también se fue en cuartos, a manos de la Albiceleste.

Por si fuera poco, este año no participó en el fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de París, después de 20 años, tras perder el cupo en el Preolímpico de Venezuela. Lo más fresco es lo sucedido en la Copa América 2024, donde quedó en el camino (otra vez en cuartos de final) ante Uruguay. Ganó apenas uno de cuatro partidos.

Dorival Júnior ha sufrido con las importantes bajas en su escuadra para esta fecha doble de Clasificatorias. El fin de semana quedaron descartados nada menos que Alisson Becker, Eder Militao y Vinícius Júnior. Tanto el portero del Liverpool como los futbolistas del Real Madrid se lesionaron y fueron desafectados de la nómina. Por el arquero, fue citado Weverton, del Palmeiras. En lugar de Vini, entró Andreas Pereira, volante del Fulham. Por Militao, se llamó a Fabricio Bruno, del Flamengo.

Un dato no menor: la Canarinha ha perdido tres de los cuatro partidos que ha jugado como visitante en estas Eliminatorias (con Uruguay, Colombia y Paraguay). Solo se impuso sobre Perú, en Lima.