En un partidazo, el Arsenal cayó como local por 1-3 ante el Manchester United en un cotejo que comenzaron perdiendo por 0-2 ya a los 11 minutos. Alexis Sánchez tuvo una buena actuación y jugó los 90 minutos.
Los Gunners intentaron un inicio semejante al que tuvieron contra el Tottenham hace tres fechas, en el que salieron con todo. Pero tal ímpetu les jugó una mala pasada, ya que la defensa quedó a merced de los rápidos y letales contragolpes de la delantera del United. Lingard, Martial y Lukaku se encargaron se destrozar una línea de tres que no contó con el apoyo del equipo en el retroceso, y que significó los goles tempraneros de Valencia a los 4' y de Lingard a los 11'.
Desde ese momento, los cañoneros instalaron un monólogo en el Emirates. Contaron con travesaños, disparos desviados por poco, pero por sobre todo, con las intervenciones de David de Gea, que se encargó de negar cualquier grito de gol pensado por los londinenses. El español tapó absolutamente todo en el primer tiempo, llevando a la desesperación tanto a Sánchez —que lideraba junto a Lacazette el ataque del Arsenal— como de Arsene Wenger.
El primer tiempo finalizó con el marcador 0-2, pero tan pronto comenzó el segundo, cambió. Y es que el Niño Maravilla hizo gala de su apodo para sacar un pase bombeado que dejó parada a toda la zaga de los Diablos Rojos. Ramsey, en solitario, controló y cedió a Lacazette para que este rematara a De Gea, que a tal distancia nada pudo hacer. Era el 2-1 y las esperanzas de darlo vuelta renacían en el norte de Londres.
No obstante, a los 63' Pogba dio una pequeña muestra de por qué es uno de los jugadores más valiosos del mundo. Se llevó en carrera a Koscielny por la banda derecha, para centrar a Lingard que convirtió con el arco despejado. Era el KO para el Arsenal, que pese a la expulsión de Pogba a los 74' por una fuerte plancha sobre Bellerin, nada pudo hacer.
Así, el buen pasar de los Gunners sufre un fuerte golpe ante un rival directo. Los de José Mourinho siguen a la caza del Manchester City, mientras que los de Arsene Wenger vuelven a caer en un partido importante.