Una de las situaciones más complejas de Santiago 2023 se vivió en Viña del Mar. Concretamente, en el Polideportivo de la ciudad. Según Harold Mayne-Nicholls, director ejecutivo de la Corporación, ahí aconteció el momento más complejo de los Juegos Panamericanos

Las goteras obligaron a la finalización anticipada del partido de balonmano entre Chile y Brasil. Sin embargo, la situación no quedó ahí, pues también desató la polémica en torno a la disputa del tercer lugar entre las Lobas y Paraguay. Dicho duelo fue suspendido y vivió varias reprogramaciones antes de finalmente llevarse a cabo con un triunfo para las nacionales.

A pesar de que han pasado dos semanas del hecho, este continúa entregando complicaciones. Hace un par de días, las Lobas publicaron un comunicado oficial apuntando directamente contra Mayne-Nicholls: “La noticia de que el partido no se jugaría y ya éramos bronce panamericano nos trajo sentimientos encontrados. Por un lado, era el partido que veníamos preparando desde hace tres años, queríamos jugarlo de todas maneras, pero por otro, entendíamos que no estaban las condiciones para que se realizara y que se tomó la decisión más adecuada dentro de las posibilidades que existían. Así, decidimos celebrar, celebrar nuestro esfuerzo y tantas horas de dedicación que culminarían con un bronce panamericano”, indican en el escrito.

“Mientras seguíamos con las celebraciones, tocaron la puerta de nuestro camarín para decirnos que se había cambiado la decisión y que el partido ahora sí se jugaría (decisión tomada para la Corporación Santiago 2023 y la Coscabal), donde incluso el director ejecutivo de la organización de los Juegos Panamericanos tuvo el atrevimiento de poner en duda nuestras intenciones de jugar este partido y le puso precio a la lesión de una deportista, sin siquiera poner en la balanza que eso podría significar el término de la carrera deportiva; comentando que se haría cargo personal y económicamente si alguna de nosotras sufría una lesión”, complementan.

Finalmente, relataron su resignación de ese momento. “Tuvimos que con mucho esfuerzo volver a enfocarnos y salir a jugar este partido que tanto habíamos esperado, después de haber celebrado una medalla panamericana que todavía no teníamos, aunque nos hubieran dicho lo contrario”, sostuvieron y abogaron por “que esta situación quede como un precedente para que se tomen todas las consideraciones necesarias a nivel organizacional para poder actuar frente a estas situaciones y no improvisar como se hizo en nuestro caso, porque ya vimos que puede causar mucho daño a nivel físico y emocional para cualquier deportista”, sentencian.

El descargo de Mayne-Nicholls

En ese sentido, Mayne-Nicholls salió al paso en la ceremonia de inauguración de los Juegos Parapanamericanos. El otrora mandamás de la ANFP entregó detalles sobre lo sucedido, algo a lo que también señaló previamente en diálogo con El Deportivo. “Hubo un momento en que se decidió que el partido se iba a suspender, pero yo quise que jugara. Hay gente a la que le molestó, porque habían dicho que no se jugaría, pero era una mala decisión y las malas decisiones no se mantienen, se cambian. Esa es mi filosofía”, comentó sobre la situación vivida en Viña del Mar, hace una semana.

“Ese día me quedé todo el día en el Polideportivo para que se juegue. Esas decisiones son mías, es parte de mi trabajo. Eso no se delega. En ese momento de crisis hay que estar ahí. Las cosas pequeñas, que las resuelva otro, las cosas grandes son mi responsabilidad”, añadió.

Mayne-Nicholls complementó su visión en conversación con Bío Bío, apuntando contras las Lobas: “No entiendo cómo alguien quiere ganar medalla sin jugar. Esto es deporte, no es administración. ¿La cancha estaba para jugar?, sí. ¿Se jugó?, sí. ¿La decisión la tomé yo?, sí. Yo por algo estoy en este cargo, para tomar decisiones y cuando alguien toma una decisión y veo que está mala, hago que se rectifique la determinación, indicó.

“Yo estaba en el estadio, a mí no me lo contaron, yo vi cómo estaba el lugar, estaba en condiciones de jugar y le pregunte a los jueces si se puede jugar el encuentro y me dijeron que sí, entonces se jugó. Todo fue bajo mi responsabilidad”, complementó.

“Que después el presidente de la Federación chilena con el entrenador hayan ido al camarín del equipo de Paraguay a convencerlas de que no jugaran para que así ambos elencos ganaran la medalla, esa es otra historia y yo no lo iba a permitir. El deporte tiene un componente muy importante que es cuando se juega y se gana dentro de la cancha. Repito, yo tome la decisión de que se jugara y pueden seguir sacando todos los comunicados que quieran y voy a seguir siendo yo el culpable de que se haya disputado el partido. Yo soy el director ejecutivo de estos Juegos y cuando tomo una decisión no tengo problemas en mantenerla”, finalizó.

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