Los ejes del plan de festejos del centenario de Colo Colo

El 19 de abril de 2025 es una fecha largamente esperada por los hinchas, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes de Colo Colo. Ese día, el Cacique cumplirá 100 años, por lo que Blanco y Negro prometió un festejo en grande, el que se extenderá durante buena parte de la próxima temporada, con más de 30 actividades de distinta índole, tanto deportivas como artísticas.

Por un lado, los esfuerzos se concentrarán en armar un plantel de alto nivel para, idealmente, intentar superar los cuartos de final logrados este año en la Copa Libertadores. Para esto, la sociedad anónima que administra a los albos deberá realizar una fuerte inversión en los refuerzos ya solicitados por el entrenador Jorge Almirón. Uno de ellos es Matías Dituro, exarquero de Universidad Católica. La meta del club es festejar el centenario con el bicampeonato en el plano local, más una actuación destacada en el ámbito internacional. Tras caer ante River Plate, Arturo Vidal advirtió que volverían más fuertes gracias a la experiencia acumulada en esta campaña.

Por otra parte, Colo Colo sigue avanzando en las actividades propias de la celebración, donde destaca la realización de amistosos internacionales cargados de simbolismo. Ahí surge el nombre del Real Valladolid, el equipo que enfrentó Colo Colo en 1927, cuando se produjo la tragedia que le costó la vida al jugador David Arellano, fundador del Cacique.

“Por don David, quien fallece en 1927 tras recibir una patada en ese partido, hay una placa en Valladolid. Nos acercamos hace un tiempo para hablar con la gente del Valladolid para explicarles y ya tenemos un acuerdo con ellos”, reveló Mosa, presidente de ByN, hace algunos días, en una conversación en TVN.

Este encuentro se va a disputar al término de la liga española, es decir, a mediados del próximo año. Asimismo, se trabaja en más rivales que se puedan sumar a estas celebraciones.

La semana pasada se llevó a cabo una reunión fundamental para afinar las celebraciones del centenario albo. Ahí, Aníbal Mosa les presentó una propuesta a los demás directores de la concesionaria, la que fue discutida largamente en esa cita.

“Tenemos una serie de actividades desde partidos amistosos, recitales musicales con conjuntos ligados a Colo Colo, con un museo itinerante que va a recorrer todo Chile, tenemos muchas actividades para desarrollar el año 2025. Como hemos dicho, queremos que sea una fiesta nacional”, había adelantado el empresario puertomontino.

Dentro de los principales ejes de la iniciativa, se encuentra el presupuesto: US$ 2 millones. Eso sí, la intención y el compromiso que se adquirió en ese encuentro es que este monto no salga en su totalidad de las arcas de Colo Colo, sino que sea cubierto en gran parte por los auspiciadores del conjunto de Pedreros. Es por eso que se está realizando un acucioso trabajo desde el área de marketing para poder atraer esos sponsors y absorber esa cifra.

También está proyectada una fiesta para 1.000 personas y otros espectáculos, que serán anunciados oficialmente dentro de las próximas semanas, de acuerdo a la información entregada por el club el día que anunció su venta de abonos para 2025. Ahí, además, se comunicó que los que adquieran ese paquete tendrán acceso exclusivo a las diversas actividades conmemorativas.

Uno de los grandes anhelos de la fanaticada colocolina es la remodelación del estadio Monumental, una idea que lleva varios años sobre la mesa y que en los últimos meses tomó un rumbo un poco más formal, con las diligencias encabezadas por Harold Mayne-Nicholls, quien fue contratado especialmente para esta misión.

El todavía director ejecutivo de la Corporación Santiago 2023 comenzó a trabajar con la empresa estadounidense Legends, la que se encuentra asesorando a los albos en este proyecto. De hecho, en el último tiempo sus ejecutivos han visitado en varias ocasiones la capital para sostener reuniones y así avanzar.

Eso sí, antes de concretar el cierre de un sponsor que se quede con los naming rights, se está realizando un profundo análisis de los costos que implica la refacción de un estadio de esta envergadura. Una de las preocupaciones que existe en la concesionaria es que los números queden cortos a mitad de camino y se deba recurrir a una inyección adicional de recursos, como un aumento sustancial de capital.

Con todos estos antecedentes sobre la mesa y una vez despejadas todas las dudas, la idea de ByN es poner la primera piedra en abril del próximo año. Un plazo que, por ahora, parece demasiado ambicioso.