Mostró seguridad desde el inicio, saliendo victorioso de un mano a mano ante Juan Martín Lucero. Nada pudo hacer en el penal pateado por el mismo delantero que significó la apertura de la cuenta, pero luego volvió a exhibirse sólido, con buenas tajadas que salvaron a su escuadra. Fue el responsable de que los albos no se fueran al descanso con una ventaja mayor. Nada pudo hacer en el resto de los goles del Cacique.

Fue el que más sufrió con los ataques del Cacique e incluso cometió el penal que le permitió a Lucero abrir el marcador, con una barrida a destiempo ajustada al reglamento. Al igual que la zaga azul, se fue afirmando poco a poco. Fue reemplazado en el complemento por Yonathan Andía, quien tampoco pudo acomodarse en la cancha.

Comenzó tímido, pero se fue viendo cada vez mejor. Hizo un trabajo silencioso que fue fundamental para alejar los intentos del conjunto de Macul en el inicio. En el segundo tiempo, fue de más a menos y tampoco pudo evitar el segundo tanto albo, que fue de gran factura y con varios toques en el área. Gol en el que erró con un cabezazo hacia atrás. Su expulsión sobre el final, por una fea infracción sobre Lucero, reflejó la desesperación de los laicos. Sus errores, pese a sus ganas, liquidaron a su equipo.

También exhibió solidez y le dio seguridad a su escuadra. Al menos, en el lapso inicial. En los últimos 45′, se notó más incómodo y tuvo problemas en la marca. Fue protagonista en la desconcentración en la zaga azul que le permitió a Colo Colo ganar el encuentro.

Otro que apareció muy poco, por no señalar que lo hizo menos que todos sus compañeros. Su desempeño fue demasiado opaco. No pidió ni apareció para colaborar con los suyos. Sufrió en una mitad del campo en el que el Cacique fue muy superior. El peor de la U.

El argentino realizó el que fue quizás su partido más bajo en la U, que tuvo muchas falencias en la mitad de la cancha. Su trabajo pasó desapercibido, en un duelo en el que debía demostrar las razones que llevaron a su actual escuadra a traerlo como refuerzo. Partido muy discreto del volante.

Fue poco protagonista en el inicio, pero su desempeñó subió con el paso de los minutos. No obstante, en el segundo tiempo volvió a mostrarse con intermitencia, sin dar luces de su mejor versión. Fue sustituido por su falta de protagonismo.

Gran encuentro, nuevamente, del volante azul. Estuvo sólido en las entregas y fue solidario con sus compañeros al momento de recuperar. Hizo un desgaste importante, motivo por el cual, pese a ser de los más destacados, dejó la cancha sobre el final. Su talento y visión de juego no le alcanzó a los universitarios.

El DT Diego López cometió un error al ubicarlo cargado hacia un costado. Por el medio, puede entregar mucho más. Aún así, fue uno de los que más cancha recorrió. No se escondió en ningún momento e intentó levantar a su equipo. Buen partido del joven volante, quien incluso sacó un disparo que pudo adelantar a los laicos en el arranque del complemento, el cual se fue levemente desviado. Su nivel decayó de todas formas.

Supo reponerse a un horrible inicio. Tuvo la primera chance de inaugurar el marcador, luego de una mano de Esteban Pávez en el área. Sin embargo, falló su remate dándole al palo. Tras ello, no obstante, peleó una pelota por la banda diestra para habilitar a Fernández en lo que terminó en el 1-1. Se diluyó en el segundo tiempo, como efecto de que su equipo igual bajó su nivel.

Su empuje fue clave para que los laicos lograran la paridad en el primer lapso. Apareció cuando más se le necesitaba con un zurdazo para derrotar a Brayan Cortés. Demostró el por qué porta la jineta de capitán, anotando en un momento importantísimo y luchando cada balón en el frente de ataque. Al igual que Palacios, estuvo desasistido en el complemento.