El Valladolid no lo está pasando bien. El equipo blanquivioleta marcha en el penúltimo puesto de la tabla y está en serio riesgo de descenso. Sus hinchas se rebelan y el ataque tiene como foco a Ronaldo, el principal accionista del club, quien asumió su control en octubre de 2018.

El detonante de la molestia de los fanáticos fue la derrota del equipo en que milita Fabián Orellana frente a la Real Sociedad, por 4-1. Después del encuentro, las dependencias del club mostraban un cartel con un mensaje elocuente: “¡Ronaldo culpable!”.

Al astro brasileño le imputan una importancia decisiva en la conformación del plantel que está a cargo de Sergio González, un factor clave para la magra campaña que han cumplido.

Un proyecto que ilusionaba

Cuando Ronaldo asumió el control del Pucela, la ilusión se apoderó de sus fanáticos. El propio nuevo propietario se encargaba de alimentar esa sensación, con declaraciones que invitaban al optimismo. “Vamos a intentar ser lo más grandes posibles”, decía. “El Real Valladolid ha reunido más de 20.000 abonados y disponemos de un gran grupo de profesional en todos los niveles. Esto no se va a quedar aquí. Queremos crecer hasta donde nuestra ilusión lo permita”, ampliaba.

En esa oportunidad, el exfutbolista, quien brilló en clubes como el Barcelona, el Real Madrid y el Inter de Milán, aseguraba que se había preparado para participar en la gestión que ahora encabeza.

“He pasado por muchas etapas en mi formación dentro del fútbol para prepararme. El fútbol es toda una pasión”, afirmaba.

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