Los Juegos Olímpicos se realizarán bajo estado de emergencia y sin público. La explicación no es otra que las consecuencias que sigue generando la pandemia de coronavirus en el mundo entero, pero sobre todo en Japón. El gobierno del país anfitrión decretó la situación excepcional en el intento de mantener bajo control los contagios y los decesos producto de la enfermedad. La definición respecto de la presencia de espectadores puede adoptarse durante esta jornada.
El primer ministro japonés, Yoshide Suga, dio a conocer el escenario en que se desarrollará la máxima justa deportiva a nivel mundial, que ya debió ser pospuesta en un año producto de la situación sanitaria. “El número de casos infectados en el área, incluida Tokio, ha aumentado desde finales del mes pasado”, dio a conocer.
Números en aumento
“El número de casos graves y la tasa de ocupación de camas sigue siendo bajo, pero teniendo en cuenta el impacto de las variantes, necesitamos mejorar las contramedidas para que la infección no se propague por todo el país”, manifestó Suga.
En tanto, Seiko Hashimoto, presidente del Comité Olímpico japonés, reveló la postura que adoptaron todos los organismos involucrados en la organización del evento. “Se hizo un juicio muy duro”, explicó. “No tenemos más más remedio que celebrar los Juegos de forma limitada”, se resignó.
El estado de emergencia decretado por el gobierno japonés se extiende entre el 12 de julio y el 22 de agosto, lo que contempla los 16 días que durarán los Juegos.