Los fanáticos de Santiago Wanderers están esperando a David Pizarro. El volante visitará Valparaíso este sábado con la Universidad de Chile y los hinchas caturros quieren hacerle sentir hostilidad. En la Quinta Región no olvidan la polémica salida del equipo del Fantasista, quien dejó la institución cuestionando fuertemente algunos manejos dirigenciales por lo que, hoy, es considerado un traidor del club.
El mediocampista volvió a Santiago Wanderers a mediados de 2015 después de una extensa y exitosa carrera por diversos equipos de Europa. El puerto era su casa y el retorno fue en grande, con miles de fanáticos dándole la bienvenida en Playa Ancha.
Sin embargo su aporte estuvo lejos de ser el esperado por los hinchas y las constantes lesiones le impidieron estar presente en la cancha. De hecho, entre 2015 y 2016, el Enano de la Providencia disputó apenas 11 encuentros entre el Apertura 2015 y el Clausura y Copa Chile 2016, antes de dejar intempestivamente la institución, lo que le valió la animadversión que sienten hoy los fanáticos hacia él. Sus números son muy exiguos en comparación con su primer paso por la institución, en el que disputó 56 compromisos entre 1996 y 1998.
Tras su salida, permaneció seis meses inactivo antes de firmar por la Universidad de Chile, en enero de este año, donde había llegado algunos días antes para entrenar y mantenerse en forma. Y pese a venir de una inactividad prolongada, en la U se ha reencontrado con la mejor versión de sí mismo. En el equipo laico ya suma 34 partidos, ha marcado tres goles y las lesiones son un tema del pasado. Es uno de los líderes futbolístico del equipo, está en la final de la Copa Chile y sigue firme en la pelea por obtener el bicampeonato chileno, tras coronarse el semestre anterior y continuar luchando en el actual Transición.
Además, ha manifestado abiertamente su identificación con el cuadro azul y, sin ir más lejos, después de la obtención del título durante la primera mitad de este año, aseguró que su anhelo es que sea la U su último equipo como profesional. "Mi idea es terminar mi carrera en la Universidad de Chile, porque donde me quieren me voy a retirar", expresó, desatando más molestia entre los porteños, que ya lo habían marcado por otras declaraciones en contra del Decano. "Nunca me había lesionado tanto en mi carrera. Y eso sin duda me afectó. Los problemas que tenía a mi alrededor me perjudicaron en lo físico. El portazo que me dieron en Wanderers me dejó sordo. Después, no podía quedarme en la casa. Salí a buscar pega y encontré a la U", aseguró el día de su presentación en el equipo estudiantil.
En Valparaíso, el habilidoso jugador buscará ratificar su buen momento y ayudar a la U a dar otro paso hacia el título. O al menos a mantenerse en carrera. Será un partido aparte en su caso, eso sí, ya que tendrá que convivir con la odiosidad de los fanáticos locales que, para bien o para mal, no se olvidan de David.