Los polos opuestos de James Rodríguez: el pilar de la Selección Colombia que anhela volver a brillar en clubes

Arranca la segunda rueda de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026 y el primer desafío de la acontecida selección chilena que dirige Ricardo Gareca es uno de los más complejos que presenta el continente en la actualidad: visitar a Colombia en Barranquilla. Si bien el elenco cafetalero viene de caer ante Bolivia, en los 4.150 metros de altitud de El Alto, el subcampeón de la Copa América se ha convertido en una potencia sudamericana. Salvo una hecatombe, estará en la Copa del Mundo.

Cuando el entrenador Néstor Lorenzo, exayudante de José Néstor Pekerman, asumió la banca de los colombianos, determinó darle una posición central a James Rodríguez. El virtuoso mediocampista ofensivo es de los pocos que quedan de la generación que clasificó a dos Mundiales (2014 y 2018). Hoy es el capitán de su seleccionado. Pero más allá de portar la jineta, se convirtió en el corazón del cuadro cafetalero. Lo demostró haciendo una notable Copa América en Estados Unidos, guiando a su elenco a la final y siendo condecorado como el MVP del certamen.

A sus 33 años, aspiro a darse una nueva oportunidad en Europa. Después de su participación en el torneo de Conmebol, con sus bonos al alza, retornó a la liga española y llegó al Rayo Vallecano, otra chance para demostrar su vigencia dentro de las competencias más importantes del Viejo Continente, aunque se trata de un club menor. Sin embargo, le ha costado reinsertarse en el cuadro de Vallecas. Se marca de inmediato una línea divisoria entre el James de la Selección Colombia con el James que juega en clubes.

Hasta la fecha, el oriundo de Cúcuta lleva apenas 97 minutos disputados en LaLiga 2024-2025. Son cuatro partidos, solo uno como titular, y no tiene goles. Recientemente, fue el director deportivo del Rayo, David Cobeño, quien se refirió al zurdo colombiano, dejando entrever que el 10 no llegó en un óptimo estado a España. Si bien afirmó que “el jugador está encantado” de estar en LaLiga y en la institución, añadió que “no vino en forma”.

“Todos los jugadores que se tiran dos o tres meses parados es normal que vengan fuera de su peso, pero con el paso de los partidos y de los entrenamientos uno va recuperando la forma. Para eso están los servicios médicos”, planteó el directivo.

Quien descollara en el Mundial de Brasil 2014 y vistió camisetas de clubes gigantes como el Real Madrid y el Bayern Múnich, tiene una deuda respecto a lo que ha realizado recientemente en clubes. Una “travesía por el desierto” que partió fichando en el Al Rayyan de Qatar, donde coincidió con Nicolás Córdova. No le fue bien. Después se fue al Olympiacos de Grecia y también pasó en el Sao Paulo. La historia se repitió.

Con la camiseta amarilla, James Rodríguez es otro jugador. Asume su rol preponderante en la estructura de Néstor Lorenzo. No por nada es el segundo jugador con más goles en Colombia (29) y el quinto con más presencias (109).

En las Eliminatorias 2026, el 10 lleva 606 minutos disputados, siendo el quinto jugador con mayor cantidad en el seleccionado cafetalero. Ha estado presente en los nueve partidos. Junto a Luis Díaz, son los únicos con presencia en todo el proceso clasificatorio. Tiene dos goles y tres asistencias. El recuerdo más fresco de James tiene que ver con su destacada performance en la Copa América de Estados Unidos, con seis asistencias y un gol en seis partidos.

Siendo el dueño de las pelotas detenidas, es el generador de fútbol de la escuadra caribeña, dentro del dibujo 4-2-3-1 que plantea con más regularidad el argentino Lorenzo. Detrás del centrodelantero (el regular es Jhon Córdoba, aunque en Bolivia jugó Roger Martínez, quien se lesionó), tiene por las bandas un complemento ideal. A la derecha tiene a Jhon Arias (de Fluminense), que brinda más apoyo en el mediocampo, mientras que por la izquierda tiene a Luis Díaz (figura del Liverpool), un puntero incisivo, quien le da profundidad y verticalidad a su elenco.

El próximo rival de Chile está invicto jugando en casa en estas Clasificatorias. De cuatro partidos, ganó tres. El único que le robó un punto fue la selección uruguaya de Marcelo Bielsa. James y Colombia son el duro escollo de una Roja complicada.