Mijaín López beso el tapiz. Se sacó sus botines y repitió el gesto para posteriormente dejarlos en el centro del escenario de París 2024. El cubano cierra su legado en la lucha grecorromana por todo lo alto. El deportista más grande en la historia de la disciplina se despidió tras alcanzar la gloria eterna y conseguir su quinta medalla de oro en una final con Yasmani Acosta.
El Gigante de Herradura escribió su propia historia y la plasmó en las páginas del deporte. Ya es una leyenda. Se convirtió en el atleta que más veces sido condecorado con el metal dorado en una misma prueba individual de los Juegos Olímpicos.
Desde Pekín 2008, pasando por Londres 2012, Río 2016, Tokio 2020 y finalizando en París 2024, son las cinco preseas de oro de López. En la capital francesa oficializó su retiro tras una carrera de ensueño. Las lágrimas propias, las de su entrenador Raúl Trujillo y las del público cubano, que lo tienen como un ídolo de la nación, hicieron único e inolvidable el momento.
Después de coronarse como pentacampeón olímpico, López se refirió a su retiro: “Me sentí un poco triste. Creo que dejar eso en el colchón es como que estás dejando algo de tu vida. Desde muy temprana edad me vinculé a este deporte. Un deporte que me ha hecho reconocido a nivel mundial. Dejé un sueño en los colchones, pero un sueño que va a dar inspiración a todos los jóvenes”, señaló para Olympics.
“El legado que quiero dejarle a todos los jóvenes que me siguen es que luchen siempre por lo que quieran alcanzar. No hay metas, no hay edad, no hay propósitos en la vida que no se puedan alcanzar. Sean sabios: siempre se dejen querer por toda la gente que les quieran, con todo sus preparadores, con su familia, que eso va a ser un legado muy bonito para poder obtener resultados grandes en el deporte”, añadió.
Por Cuba
En zona mixta, el Gigante de Herradura se reunió con la prensa cubana y entregó un sentido mensaje para el país: “Contento de poder lograr este objetivo. Contento de haber cumplido con lo que había prometido en Cuba (...) Fueron años de muchos sacrificios, pero me queda la gran satisfacción de haberlo dado todo por Cuba”, comenzó señalando. “Contento de aportar con ser el mejor atleta de Cuba y no solo de Cuba, sino del mundo”, complementó
También reiteró sus sensaciones sobre su retiro y valoró a quiénes fueron importantes en sus últimos Juegos Olímpicos: “Los dejé, quería ir a recogerlos de nuevo, pero nada, la historia está. Cumplieron la misión, se quedaron donde tienen que estar”, comentó.
“La motivación se la debo a todo el colectivo médico, a todo el colectivo de entrenadores, a todos los que hicieron posible para que Mijail se mantuviera entrenando para poder efectuar estos Juegos Olímpicos, a todos los atletas jóvenes inspirados que vienen detrás de mí para lograr el triunfo internacional. Fue muy importante para mí compartir con esos jóvenes y poder estar aquí, indicó.
Finalmente, terminó con un mensaje para Cuba: “En estos momentos, quiero estar con mis amistades, con la gente que está a mi alrededor, ya que mi mamá y mi hermano está en Cuba. Todos están esperando ansiosamente, pero tengo que seguir cumpliendo el compromiso con la delegación y seguir apoyando a los jóvenes que siguen esperando resultados. Solamente decirle a los cubanos que se logró el objetivo y felicidades a todos”, sentenció.