De golpe y porrazo Luis Ahumada (65 años) se quedó sin trabajo el pasado martes. El ahora ex jefe técnico de las selecciones juveniles de Chile pensó que iba a una reunión normal en la oficina de Sebastián Moreno y salió con el sobre azul bajo el brazo, decisión que, en conversación con La Tercera, dice no entender.
¿Cómo se gestó su salida?
Fue el presidente el que me comunicó en forma personal su decisión de que no seguía como jefe técnico. Fue sorpresivo, pero a medida que uno va analizando las situaciones, se veía que podría haber algún cambio.
¿Qué razones le dieron?
La verdad es que no entendí mucho, porque si te hago un relato de estos tres años y 10 meses que estuve al mando desde que me trajo Arturo Salah, le dimos continuidad a las selecciones juveniles, esto trajo como consecuencia haber ido a tres Mundiales, competir en Sudamericanos. La verdad es que no se entiende mucho, mi salida me parece extraña.
¿Qué cree que ocurrió?
Por desempeño no fue. Si fuese por resultados, y se lo dije a Moreno, he sido el jefe técnico que en el tiempo, y en tan corto tiempo, que ha tenido mayores logros: fuimos a Mundiales, ganamos los Odesur, hay jugadores de proyección…
¿La rebelión de los clubes influyó?
Son análisis que no me corresponden, pero definitivamente no sé cuál es la verdadera causal, la real, de mi salida. Se hizo un trabajo importante, con errores, pero con el apoyo de la ANFP.
¿Teme que lo hecho se vaya a la basura?
No podrían hacerlo, porque quedó establecido y es un beneficio para el fútbol formativo. Estábamos todos de acuerdo en las reuniones con jefes y clubes. Con el apoyo de la ANFP compramos máquinas para medir científicamente las capacidades de los jugadores, entonces sería muy difícil empezar todo de cero.
¿Qué balance hace?
Estoy muy contento. La decisión, según me dijo el presidente, la tomó el directorio porque querían darle otra dirección al fútbol, pero no sé qué dirección si el fútbol es uno solo. Quizás uno de los errores que cometí fue haber aceptado otras cargas de trabajo distintas a la original.
¿Alguna autocrítica?
Lógicamente, no soy perfecto ni mucho menos. Debo reconocer que cometí errores y no pude ser más firme en haber exigido, por ejemplo, que a la Sub 20 llegara de inmediato un entrenador. Pero creo que mayoritariamente fue positivo. No tuvimos problemas salvo situaciones normales cuando tienes 30 personas a cargo.
¿Cuál es su legado?
Ha quedado una plataforma súper importante, que era uno de los objetivos, para que nunca más las áreas juveniles no tengan información. Cuando llegué había cero información de lo que se había hecho anteriormente y hoy, desde 2016 en adelante, quedó todo en una plataforma web que funcionará más adelante con los clubes. Se hizo por ejemplo un plan piloto con la Sub 17 con el Ministerio de Cultura para que los jóvenes lean. Y lo íbamos a replicar este año con las otras categorías. Cuando van a Riera los jugadores tienen dos profesores. Hicimos un manual de comportamiento que va desde las redes sociales a otras cosas.
¿Se va dolido?
Me voy sorprendido. Enrabiado, no. Porque se dejaron cosas y para mí lo principal es el fútbol formativo.
Llegó con Salah, el emblema de los procesos, ¿se puede decir lo mismo de Moreno?
No. Porque no ha tenido un directorio estable, ha tenido problemas. Lamentablemente en el año que estuve con él, aunque trabajé sin problemas, al final se perdió la confianza, no sé por qué motivo, y se cortó todo. Entonces, ese año es muy poco para haber desarrollado algo con él.
¿Pudo siempre trabajar tranquilo y con las herramientas necesarias?
Cuando llegué en 2016, con todo el problema que se encontró Arturo Salah después de Jadue, el fútbol femenino estaba botado hace cuatro años, y me pidieron que me hiciera cargo también de eso. Lo hice con agrado e hicimos un buen trabajo, se logró reformar el fútbol femenino. Tuve que unirlo con el fútbol juvenil masculino, con reuniones técnicas junto a Sebastián Moreno que era secretario general. Además, entre 2017 y 2018 se me dio la tarea de responsabilizarme de los presupuestos de cada categoría. Luis Ahumada se hizo responsable de eso, por lo tanto la carga de trabajo era mucho mayor que la que tenía cuando llegué. La no clasificación a Rusia 2018 nos trajo un problema porque los ingresos los genera la Adulta y había muchos problemas ahí. Se perjudicaron todas las otras áreas.
¿Moreno mostró ganas de hacer crecer al fútbol joven?
Creo que estaba con ganas, pero en definitiva, con todos los problemas que ha tenido con su directorio, siempre ganan las prioridades, y en las prioridades de Moreno no estaba el fútbol formativo.
¿Es precario el fútbol joven en Chile?
Hay una cancha en el complejo Fernando Riera que no se puede usar porque hay una reja rota hace casi un año y hay problemas con los vecinos porque se caen las pelotas. Falta mucho en nuestro país, que el mundo de fútbol se ponga de acuerdo. Si al final las selecciones serán el producto del trabajo de los clubes. Tenemos falencias súper relevantes.
¿Es profesional el fútbol juvenil en Chile?
M pasó ver a un jugador que no sabía cabecear, que iba con los ojos cerrados. Le pregunté y me dijo que nunca había tenido una práctica exclusiva de cabeceo. Tenemos un complejo en Quilín que se dice que es para los jóvenes, pero no lo es. Lo usa todo el mundo. Cualquiera consigue la cancha. Estamos en desventaja con muchos países. Lo que se necesita son muchas horas de trabajo y dedicación. Tiene que haber una preocupación de los clubes, qué es lo que enseñan. Hay falencias en los clubes, se tiene que revisar. Lamentablemente todavía se llega a una Sub 15 con muchas falencias y eso nosotros habíamos estado conversando con los clubes.
¿Hay excepciones?
Evidentemente. La Católica o Colo Colo trabajan bien, no hay dudas. Cuando ves a jugadores que pueden estar en una selección, ¿cuáles son? Los que trabajan mejor. Y cuando me dicen 'pero ustedes solo llevan de Santiago', les digo que eso es mentira, porque ocurre que los clubes de Santiago, que tienen más plata, se llevan a los de regiones. Valencia, de Católica, es de La Serena.
¿Y la U?
Ha estado estancada. ¿Cuáles son los jugadores que realmente han llegado al primer equipo? No hay.
¿Qué foto le saca al fútbol joven?
Me lo he cuestionado mucho. Y lo grafico en esto: en el Sudamericano Sub 15 anterior nos ganó 6-0 Argentina. Y los jugadores de Colo Colo lloraban en el camarín. Le pregunté a uno por qué lloraba, y me dijo "es que es primera vez que pierdo un partido". Y eso por qué pasa, porque en Chile Colo Colo se lleva a los mejores y gana por goleada siempre, y ahí se pasan a uno y otro rival, y en el Sudamericano no eran capaces de pasarse a uno. La competencia nuestra no es tal. La parte mental de nuestros jugadores también es un tema complejo. Dónde viven, cómo comen, cómo estudian. Con un psicólogo para todas las series no era suficiente. Físico hay; técnica hay.
¿Se forma bien en Chile?
En el INAF no hay un control. Está en un proceso de sacar muchos entrenadores y no ven la calidad. No hay supervisión. Tiene que haber alguien que mire si el entrenador está enseñando lo que se tiene que enseñar en una sub 11, sub 12, y no solo parar cuatro defensas.
¿Le molesta que se exija recambio?
La prensa en general no cotiza mucho al fútbol formativo, no le da importancia. Yo estoy de acuerdo con las críticas, pero cuando sean adultos y profesionales. Y que el que no anduvo, no gana en tres partidos y se va. Pero a los jóvenes no, hay que tener paciencia. La prensa no se da cuenta y los mata de una manera brutal. Los entrenadores también tenemos responsabilidad, si al final estamos todos involucrados y nunca nos hemos puesto de acuerdo.
¿Cuánto han afectado los representantes?
Hace poco estuve en una reunión en Paraguay y estaba el Pacho Maturana. Le hice esa pregunta y él decía que hay que entender que los representantes son parte de la actividad. Y es así, hay que buscar las estrategias para que ellos ayuden al jugador. Hay que lograr decirles si es que se lo quieren llevar a los 18 años o que cumpla en su club partidos en Primera y que cuando esté preparado que se vaya.
¿Los futbolistas jóvenes están conscientes de la crisis que viven?
No se dan cuenta. No logran entender, porque no han sido capaces los clubes ni nosotros mismos, qué es lo que se les viene. A veces, cuando ganan un Sudamericano, creen que ya están, que ya llegaron, que ya son profesionales. Y no lo son. Ahí tiene que haber una mano de los entrenadores, clubes, selecciones, familias, representantes, sus estudios.
¿Le dolió la abrupta salida de Caputto de la Sub 17?
Es difícil abstenerse a decir que no cuando te ofrecen, no sé, tres veces más. Pero creo que a esa selección sí le afectó la salida de Caputto, porque venían de un proceso y los chicos estuvieron un mes parados hasta que llegó Cristián Leiva, que los conocía de la Sub 15, pero ahora ya no eran tan chicos.
¿Por qué estuvo tanto tiempo sin técnico la Sub 20?
Hubo muchas críticas por estar más de un año así, pero yo fui muchas veces a hablar con Moreno para decirle que era necesario tener un cuerpo técnico, pero hizo oídos sordos a esa petición.
¿Por qué?
No lo sé, porque estaba el presupuesto para traer un nuevo cuerpo técnico, pero lamentablemente nunca me dieron las razones de por qué ese cuerpo técnico no llegó hasta mi salida.
¿Usted eligió a Ormazábal?
No, para nada. Esa es decisión del directorio. Rueda tampoco tuvo conocimiento de la llegada de Ormazábal. Las cosas no se hicieron adecuadamente, pero eso ya es resorte de la directiva.
¿Le parece la persona idónea?
Conversé con Moreno hace un par de meses y le dije que necesitábamos urgente un cuerpo técnico. Me dijo que le mandara una lista de candidatos. Yo ya había hablado antes con algunos y le mandé lo que me pidió. Y le mandé seis alternativas, en las que no estaba Ormazábal. Yo buscaba que hubiera trabajado en el fútbol formativo, habiéndolo hecho bien y que tuviera experiencia en el fútbol profesional, una mezcla que era difícil, pero había. Pero Moreno no tomó nada de eso en cuenta.
¿Quién era su candidato?
José Luis Sierra. Estaba sin club, era el que me gustaba. Hizo un buen trabajo en las divisiones menores de Unión. Era mi deseo, pero no se logró; lo otro ya estaba listo.
¿Se relacionó con Reinaldo Rueda?
Sí. Ahí hubo un salto de calidad respecto a técnicos anteriores, permanentemente las selecciones él tuvo toda la disposición para entrenar en Juan Pinto Durán y usar sus instalaciones.
¿Qué hará ahora?
Tengo mucho por aportar aún. No es de arrogante, pero en Chile hay pocas personas que pueden decir que solo han trabajado en el fútbol formativo. No he recibido nada, pero sí estaré llano a recibir alguna propuesta.