El delantero belga del Manchester United, Romelu Lukaku, debió salir de la cancha en camilla y con oxígeno tras ser golpeado en la parte trasera de la cabeza. El accidente, tan solo a los nueve minutos de juego, dejó en vilo a los asistentes en Old Trafford, que observaban el duelo contra el Southampton.
Tras disputar una pelota aérea con Wesley Hoedt, el atacante cayó al suelo y quedó inmovil. Rápidamente los paramedicos ingresaron a la cancha del Teatro de los Sueños para atanderle, mientras él permanecía en el suelo sin moverse. Esto se prolongó por varios minutos.
Finalmente, cuando Lukaku mostró signos de conciencia, fue subido a la camilla y asistido con oxígeno. Abandonó el campo de juego ovacionado por el público.
Se cree que estará al menos fuera dos partidos, y esta lesión se suma a la de Zlatan Ibrahimovic, quien también se perderá acción por al menos un mes.
