Alexis Sánchez cayó junto al Manchester United en su visita al Newcastle por 0-1. El chileno tuvo un regular desempeño, aunque fue el mejor de su equipo.
Cuesta pensar que Sánchez imaginara, en su arribo al Manchester United, vivir partidos tan parecidos a los que sufrió con el Arsenal. Con jugadores sin actitud, equívocos y displicentes. Si el tocopillano creía que los equipos menores no le crearían problemas, ni mucho menos ganarle, estaba totalmente equivocado. Porque eso es lo que vivió frente al Newcastle: un equipo menor venció, sus compañeros no dieron la talla y el juego de los Diablos Rojos no estuvo a la altura de lo que espera de un plantel con tales nombres.
El partido inició friccionado, con el pragmatismo de Rafa Benítez, DT de las Urracas, implementado en su totalidad. La presión a la salida del United fue asfixiante, con Pogba y Matic erráticos en el mediocampo. La pareja de mediocampistas perdía balones, propiciando que los primeros minutos del partido se jugaran enteramente en área visitante. Alexis, escorado por la banda izquierda, nuevamente ponía en acción su faceta recuperativa, ayudando en defensa. Incluso De Gea tuvo que despejar un buen remate que se colaba por su palo derecho.
Pasada la media hora, la posesión comenzó a equilibrarse. Martial, a los 35', tuvo un mano a mano claro que terminó ganando el portero tras despejar con su pie izquierdo. Fue la oportunidad más clara del primer tiempo para el equipo del tocopillano, que destacaba por su movilidad y creación, aunque ninguno de sus centros pudo encontrar a Lukaku.
El segundo tiempo inició con otro ritmo. Más intenso, con más temeridad por parte de ambos equipos. Sin cambios en el equipo, los de Mourinho se abalanzaron al área rival. El máximo artillero en la historia de la Roja demostró su calidad en una jugada personal dentro del área, aunque su remate se fue desviado. A los 56', no obstante, tuvo una chance que pudo definir el partido. Recibió dentro del área y se sacó al portero, quedando con la portería despejada aunque un poco inclinado hacia la derecha. Por esta razón dudó en definir, y para cuando ya remató, un defensor se interpuso en su camino.
Poco más pudo hacer, ya que a los 65' vino la apertura de la cuenta en el St. James Park. Tras un tiro libre, el pivote de cabeza fue aprovechado por Ritchie, que desde el centro del área definió con potencia. Nada pudo hacer De Gea ante un tiro que pudo existir en primer lugar gracias a la deficiente marca de Pogba, quien fue sustituido inmediatamente tras el gol.
Los cambios que realizó el técnico luso no pudieron hacer nada. Mata, quien ingresó por el galo, no logró asociarse del todo con el chileno, que dejó la banda izquierda y se colocó en el centro. Erróneamente, se olvidaron de abrir el campo, por tanto a los locales se les hizo muy fácil cortar el juego por el medio. Ningún centro fue efectivo. Martial tuvo una doble ocasión casi desde el punto penal, aunque en ambas instancias el balón fue despejado desde la línea.
El asedio en los últimos diez minutos se hizo inminente. Ya el Newcastle ni podía aprovechar un contragolpe. La recuperación de los Red Devils era rápida, no obstante la definición, imprecisa. El partido terminó así, con el United perdido en intentos fútiles, apelando a la suerte y a un error del rival. Nada sucedió. El Newcastle ganó mereciendo.