Diego Maradona abrió con lágrimas y humildad su ciclo en Gimnasia y Esgrima de La Plata. Una cosa fue la multitudinaria presentación que se realizó en El Bosque, el nombre coloquial que recibe el recinto donde juega el Lobo, el apodo que le dan al nuevo equipo del Diez. Y otra lo que ocurrió en los espacios más íntimos del recinto en que juega el equipo que busca en el ex capitán de Argentina el tónico que necesita para salir del último puesto de la Superliga y para escapar del descenso. El milagro para el que ficharon a quien muchos elevaron a la categoría de dios del fútbol.
Ahí, en la intimidad del vestuario, Maradona se mostró auténtico y emocionado. Habló con el capitán del equipo, Lucas Licht. "Yo los quiero ayudar. Ustedes me ayudaron a mí y yo los quiero ayudar", le dijo el Diez al volante, tomándole el rostro con ambas manos, según cuenta el sitio transandino Infobae. Licht quedó visiblemente emocionado. Y lloró.
El astro recibió, también, un par de significativos llamados. En el trayecto hacia los vestuarios, atendió el de su ex compañero en Boca y la selección argentina, Claudio Paul Caniggia. También le llamó Enzo Francescoli, actual director deportivo de River Plate. Ambos le desearon suerte. El Príncipe, de hecho, le dio la bienvenida a la primera división transandina, pese a que, en rigor, serán rivales. Hubo, también, saludos para cada uno de los integrantes del cuerpo técnico y médico. Y para cada uno de los auxiliares que trabajan en torno al plantel.
El staff está en pleno proceso de formación. Maradona intenta reclutar al equipo audiovisual que lidera Bruno Maffoni, que ya lo acompañó en sus pasos por Al Fujairah y Dorados. Muy cerca suyo trabajará, también, su sobrino Daniel López Maradona. El último nombre al que tiene en mente Maradona es el de Blas Giunta, histórico volante de Boca Juniors, cesante desde que dejó la banca de Almirante Brown.
El ejecutor
Sin embargo, el depositario del mayor acto de humildad fue Sebastián Méndez. El Gallego, ex técnico de Palestino en la temporada pasada, será su ayudante técnico, aunque, en rigor, será quien asuma la labor más ejecutiva en el staff durante los días en que Maradona no esté, producto de las limitaciones que le genera la cirugía en la rodilla derecha a la que fue sometido. Eso, al menos, de acuerdo al compromiso contractual, pues el astro ya dejó establecida su intención de trabajar el máximo tiempo posible junto a sus nuevos pupilos.
Maradona le atribuyó a Méndez la importancia que tendrá en el proyecto, pese a que nunca antes han trabajado juntos. Un verdadera bendición. "Yo me voy a recostar en vos, Gallego. La cabeza del grupo sos vos. El día a día es tuyo. Yo me adapto, estoy para escucharte, para que trabajemos juntos en lo que propongas. Sobre todo, para trabajar, porque yo vengo a trabajar mucho, como siempre lo hice", le dijo.
De vuelta, recibió un discurso similar. "Yo también vengo a trabajar mucho, Diego. Y no vengo de paso. Estoy orgulloso de tener esta posibilidad y que sea al lado tuyo. Vengo a salvar a Gimnasia y, si conseguimos el objetivo, va a ser un doble premio, porque va a ser de tu mano", le dijo el Gallego. Méndez asumió de inmediato su rol, aunque dio un paso al costado cuando Maradona se acercó para vigilar los ejercicios de definición. Ambos tendrán importancia en la definición del equipo y de los sistemas que emplearán. Maradona aportará el plus emocional.