Martín Ulloa, el chileno que emocionó a Pucón

Martín Ulloa cruza la meta del Subaru Ironman 70.3.
Martín Ulloa cruza la meta del Subaru Ironman 70.3. Foto: Sebastián Miranda/Prensa y Comunicaciones CDUC

El triatleta fue segundo en la categoría varones del Subaru Ironman 70.3, detrás del español Antonio Benito. Luego de cruzar la meta, el deportista demostró su alegría hasta llegar a las lágrimas.



Huincha Subaru

En enero de 2022, Martín Ulloa pasó por uno de los momentos más complicados de su vida. En la edición pasada del Subaru Ironman 70.3 de Pucón, el deportista nacional se descompensó. Había iniciado bien en la competencia, siendo parte del grupo de avanzada en nado y ciclismo. Sin embargo, en la transición al trote, abandonó la carrera.

El atleta, hoy de 28 años, vivía un episodio inesperado. Algo que en el alto rendimiento puede ocurrir, pero que nunca es anticipado. “Al parecer me pillaron unas condiciones genéticas cardíacas, que no había controlado bien y apagué tele de lo lindo”, fue su honesta explicación, a través de las redes sociales.

El formado en el Club Deportivo Universidad Católica viene siendo un fijo entre los deportistas de élite de la competencia de la región de la Araucanía. Por lo que dejar atrás el trago amargo de lo vivido hace doce meses era vital para el competidor. Y, más allá de no ser el primero, lo consiguió con creces.

Martín Ulloa celebra su lugar en el podio.
Martín Ulloa celebra su lugar en el podio. Foto: Prensa y Comunicaciones CDUC

Alta preparación

A solo semanas de su participación en Pucón, el deportista expuso, mediante un video, parte de la preparación que efectuó para llegar al medio ironman. “Muchos élite suben fotos y todo se ve bien, se ve lindo, pero hay días de sufrimiento. En mi cumpleaños número 28, estoy entrenando, para machacar y ponerle huevo”, decía.

Jornadas después, cruza la meta en tan solo 3h, 59′ y 20′', cuarenta segundos menos que el tercero, Marc Dubrick. Cuatro minutos más que el ganador Antonio Benito López. Con su subliderato, el chileno rompió en llanto. Significaba superar uno de los instantes más complejos de su carrera.

Abalanzado sobre la reja, sus familiares lo abrazaron en el momento de emoción. “Fue una de las mejores corridas de mi vida, un día soñado de principio a fin. Un nado donde sé que puedo estar, un ciclismo controlado, en el que ejecuté lo entrenado, y un maratón de pura garra. Eso es todo lo que tengo”, fue lo primero que dijo tras supera la línea de meta.

El mejor chileno, en la categoría masculina, de la jornada, recuerda su trayectoria para lograr meterse en el podio. “Esto ha sido algo de muchos años. El país se merecía esto y yo también”, reconocía.

Lágrimas de alegría

A medida que los minutos avanzaban, el sentimiento de alegría se hacía notar en su rostro. Y sus palabras se iban cortando. “Desde los doce años he visto a Reinaldo Colucci ganar, a Daniel Fontana imponerse; a uno de mis mejores amigos, Felipe Barraza, subirse al podio un montón de veces. Igualar a mi mentor es un sueño. Han sido quince años duros. No solo tres semanas de entrenamiento, sino que muchas mañanas y noches de trabajo”, relataba.

Junto a la campeona Bárbara Riveros, Martín Ulloa fue el más aplaudido por la gente que repletó la costa del lago Villarrica. Su actuación no dejó indiferente a la parcialidad. Tampoco a quienes predecían las opciones. Hace dos ediciones que un nacional no arremetía en el segundo puesto. Felipe Barraza fue sublíder en 2017, a quien, precisamente, recordó Ulloa en su momento de declarar.

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