Más allá del Kun Agüero: los futbolistas que debieron decir adiós por problemas cardíacos

Este miércoles, el delantero Sergio Agüero comunicó su retiro del fútbol profesional. Todo esto a raíz de una afección cardíaca que se manifestó el 30 de octubre durante un partido en el que el argentino defendía al Barcelona, debiendo abandonar la cancha antes del fin del primer tiempo.

Si bien permanecía con la esperanza de que los exámenes mostraran un desarrollo favorable, esto no fue así, debiendo colgar los botines con el objetivo de privilegiar su salud.

El caso del Kun es uno de los casos de este tipo más recientes, pero es algo que se ha ido repetido con frecuencia en el mundo del fútbol.

En mayo de 2019 el portero y figura española Iker Casillas, campeón en el Mundial de 2010, sufrió un infarto cuando entrenaba con el Porto, club al que partió tras terminar su relación contractual con el Real Madrid.

El jugador pasó unos días hospitalizado hasta que pudo recuperarse. Sin embargo, tras la dolencia, y pasar algún tiempo como parte del cuerpo técnico de los portugueses, decidió retirarse del fútbol tras pasar cerca de un año sin competir.

Otro caso es el de Rubén de la Red. El volante sufrió un desvanecimiento durante un partido de la Copa del Rey cuando defendía al Real Madrid en 2008. Este percance lo obligó a poner fin a su carrera con 25 años cuando asomaba como una de las promesas del fútbol español. Tras los análisis médicos decidieron instalarle un desfibrilador por precaución. Su retiro oficial se produjo dos años después.

Lilian Thuram es otro jugador que debió decirle adiós al fútbol antes de tiempo. El defensor francés, campeón en el Mundial de Francia 1998, preparaba su traspaso desde el Barcelona al Paris Saint-Germain cuando en los exámenes médicos se le detectó una malformación cardíaca que lo apartó del deporte a los 36 años.

Uno de los casos más críticos ocurrió en el duelo entre el Bolton y el Tottenham por la Copa FA. En la disputa de los cuartos de final de la competencia el congolés Fabrice Muamba se desplomó tras sufrir un paro cardíaco.

Casi cinco meses después, anunció que deja el fútbol por recomendación médica, tras haber visitado a los cardiólogos más importantes del Reino Unido y Europa. Como parte de su tratamiento le implantaron un desfibrilador.

Otro portero que sufrió las consecuencias de un problema cardíaco fue el español Manuel Almunia. El guardameta esperaba sumarse a las filas del Cagliari, pero los exámenes médicos detectaron una miocardiopatía hipertrófica apical, una enfermedad genética del corazón que en los casos más graves puede causar una muerte súbita, por lo que dejó las canchas con 37 años.

Fue la imagen más impactante en la Eurocopa de 2020 que se disputó este año. Christian Eriksen se desplomó en el partido en que la selección danesa se enfrentó a Finlandia. El atacante recibió reanimación en el propio terreno de juego y fue trasladado a un hospital donde fue estabilizado y se le implantó un desfibrilador.

Desde ese momento, el jugador del Inter no ha vuelto a la actividad y esto, al menos, no podrá lograrlo en la Serie A, pues una normativa del torneo italiano prohíbe que los jugadores con desfibrilador compitan en el torneo.

De hecho, su agente se encuentra en la búsqueda de un club fuera de Italia. “Cada jugador tiene un valor contable. Y dado que Christian es un jugador contratado con el club, técnicamente todavía tiene un valor contable. Es una cuestión de contabilidad y no tanto sobre el propio Christian. Christian está bien. Pasa mucho tiempo con su familia. Está en buena forma. Si hay más novedades, se comunicarán”, manifestó Martin Schoots al sitio Goal.