Otro día de malos resultados para Chile en Pyeongchang. Si es que a lo que consiguieron el miércoles Noelle Barahona y Kai Horwitz se le puede llamar resultados, pues ninguno de los dos fue capaz de terminar sus respectivas pruebas. Ni siquiera llegar a la segunda etapa, cuando el único requisito para hacerlo es finalizar la primera.
La jornada para los nacionales empezó con Horwitz, en el eslalon. Al primo de Henrik Von Appen le tocó bajar en el turno 79. Sólo alcanzó a pasar dos controles antes de ser descalificado por saltarse uno de los obstáculos que delimitan el camino. Al igual que el domingo pasado en el eslalon gigante, vio la segunda pasada de los finalistas por televisión.
Describir el nuevo fracaso de Noelle Barahona, que compitió justo después, es casi lo mismo. En su cuarta y última prueba en Pyeongchang, la combinada (primero hay una bajada en descenso y luego otra en eslalon), la chilena quedó afuera en su primer recorrido, el que se hace en la modalidad que es su especialidad y en la que consiguió su mejor resultado olímpico un día antes. La chilena se saltó una de las puertas después de pasar el tercer control, el cual proyectaba que iba a terminar en la posición 24.
Esta descalificación se suma a la que sufrió en el eslalon gigante. Así, entre Horwitz y Barahona, están las cuatro descalificaciones que ha sufrido la delegación chilena en estos Juegos.