En Universidad de Chile la derrota frente a Palestino caló hondo. El equipo que entrena en La Cisterna había logrado entusiasmar a sus hinchas y dirigentes tras la victoria frente a Unión Española, por la cuenta mínima, en el duelo jugado disputado en Valparaíso. Sin embargo, en la caída ante los árabes, los fantasmas de un equipo sin respuesta volvieron a aparecer.
Pellegrino, en la conferencia de prensa, intentó desdramatizar la caída. No cree que su esquema sea el problema, pese a que sus futbolistas parecen sentirse incómodos en el campo de juego. “No veo que el equipo esté incómodo, veo que el equipo está bien, que controla al rival, por ahí nos falta funcionamiento. Pero no es un tema del sistema de juego”, dijo el argentino.
Lo cierto es que el estratega de la U, poco a poco, ha ido empoderándose en el Centro Deportivo Azul. Sus primeras semanas fueron más de observación, de querer conocer cómo funcionaba el club. A la distancia, con una seriedad con la que marca los límites de cada funcionario, Pellegrino se alineaba para iniciar su primera temporada en el fútbol chileno.
Sin embargo, más allá de su pasividad, el estratega nunca dejó de imponer sus términos. Por ejemplo, pese a la presión popular que existía por el arribo de Marcelo Díaz, quien se ofrecía por las redes sociales, el estratega siempre le transmitió a Manuel Mayo, el gerente deportivo, que el volante no era su prioridad. Avisó que prefería llenar otras posiciones antes de firmar al hoy jugador de Audax Italiano. Lo mismo sucedió con Felipe Gutiérrez: el exjugador de la UC está al alcance de la mano, con sueldo acordado, incluso ya se reunió con Manuel Mayo. Sin embargo, Pellegrino quiere agotar otros créditos antes de dar el sí.
Desde la concesionaria no pierden la fe en el trabajo de Pellegrino. Creen que aún se está adaptando al club, pese al feo traspié frente a Palestino. Sin embargo, repiten que día a día el DT va cambiando en su opinión respecto a las posiciones que quiere reforzar. “Ha pedido un 10, un punta, un lateral izquierdo. Los técnicos no se cansan de pedir cuando pueden armar el equipo”, dicen desde el club.
Es que el transandino no se quiere equivocar. Sabe que se juega mucho de su futuro en Chile. Por eso mismo, el DT ha dejado en claro que buscarán hasta el último día. El cierre del libro de pases del torneo nacional será este miércoles a las 23.59 horas. “Todos los jugadores que queremos traer siempre entran en un debate que tenemos con la directiva del club. Hay muchos futbolistas estamos estudiando, pero todavía no decidimos nada aún y esperaremos hasta el último día. Estamos en eso. No daré una opinión de un jugador que no está en la institución”, dijo. “No me corresponde que yo entregue los nombres. Estoy conforme con lo que tengo, pero eso no significa que no aspire a más. Tampoco es fácil encontrar futbolistas que encajen con el presupuesto o que puedan ser mejores que los que ya tenemos a disposición”, agregó.
El Santa Laura no pasó la prueba
Más allá de la paupérrima señal que entregó la cancha del Santa Laura en la igualdad entre Unión Española y O’Higgins, en el duelo disputado este sábado, Universidad de Chile realizó una visita el martes de la semana pasada a la cancha principal del reducto de Independencia para evaluar en terreno los avances que supuestamente tendría el césped. En la U no querían volver a sufrir con el campo de juego, como acusan lo sintieron en la derrota frente a Huachipato, en el partido de la primera fecha del torneo nacional.
Lo cierto es que la cancha no pasó la prueba. Mauricio Pellegrino, de manera insistente durante las últimas semanas, le ha repetido a la dirigencia que no quiere volver a jugar en un campo de juego con ese estado del césped. Desde la dirigencia la idea era compartida. El DT, luego del partido frente a los acereros, se quejó con su círculo más cercano. No solo porque atenta contra el estilo y el modelo de juego que pretende implementar, sino también pone en riesgo la integridad física de los jugadores. “En Primera División no me tocó nunca jugar en una cancha así: mucha arena, poco pasto y es muy difícil jugar al fútbol. Me da mucha pena que como fútbol chileno tengamos que pasar por esto”, se quejó Juan Pablo Gómez, el lateral de la U.
Este domingo, incluso, se sumó el SIFUP. “Por los jugadores, por la gente, por el espectáculo, por todo… Lo de Santa Laura es impresentable; se arriesgan lesiones graves”, dijeron desde la entidad que agrupa a los futbolistas del país. “No podemos seguir avalando este tipo de recintos. Los profesionales del fútbol merecen respeto”, lanzaron, en una crítica dirigida no solo a los clubes, sino que también a la ANFP como ente rector del fútbol chileno.
Frente a tal escenario, en Universidad de Chile ya avisaron que el duelo frente a Magallanes se jugará el próximo sábado, en el estadio La Portada, de la Cuarta Región, a las 12 horas. El Elías Figueroa, de Valparaíso, no está disponible.