Mauro Quiroga, máximo goleador del torneo: "El fútbol chileno tiene un toque europeo"

MAURO QUIROGA
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En su segunda temporada en el fútbol nacional, el ariete argentino se destapa como el máximo anotador del campeonato (7).



El currículum de Mauro Quiroga (29) no tiene nada que envidiarle a ningún futbolista. La figura de Curicó Unido, máximo artillero del torneo nacional, con siete anotaciones, partió a Europa con apenas 20 años desde la tercera división argentina, luego de convertir 16 goles con Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay. Las Palmas, Lugo y Alavés lo disfrutaron en España. Hoy comanda el equipo que conduce Giovagnoli. Ante la U. Concepción buscará hoy acrecentar su registro.

¿Imaginaba su arranque?

Uno siempre trabaja esperando lo mejor, pero me concentro más en lo colectivo que en lo individual. Estamos en pleno crecimiento, con una mejora que se nota partido a partido. No perdemos el foco de seguir mejorando. En lo particular, estoy contento con mi momento y mi nivel.

¿Pero pensó que llevaría siete goles en 10 fechas?

Es un buen número de goles. No me esperaba llevar tantos, pero todo es producto del trabajo. Sin la ayuda de mis compañeros sería imposible.

¿Es su mejor inicio?

Sí, sin lugar a dudas. La única explicación que le encuentro es, además del trabajo, que estoy muy convencido de lo que hago. Estoy con mucha confianza y en óptimas condiciones físicas.

¿Le nublan los halagos?

No. Hay que seguir buscando, sumando, creciendo, pero con los pies en la tierra. Eso lo tengo muy presente.

¿Está en el mejor momento de su carrera?

Ojalá que el mejor momento esté por llegar. Analizando los números, sí. Me siento muy bien en todo sentido. Física y futbolísticamente. Y lo más importante es que he madurado, he aprendido de las situaciones que he vivido. Trato de sacar experiencia de las cosas buenas y malas. Uno va sumando de todo en la vida.

¿Fue desordenado?

No, pero en la vida misma uno comete errores, decisiones que no son las mejores. Se va creciendo y se aprende de todo. Luego se hace más fácil, porque uno toma decisiones con situaciones que ya vivió.

¿Se le hace más fácil el fútbol chileno por su envergadura (1,91 metros)?

Puede ser, pero me adapto a lo que el equipo requiere, al sistema del entrenador. Y trato de explotar al máximo mis condiciones.

¿Cómo salta de la tercera división argentina al fútbol español?

A través de mi representante. Tuve una muy buena temporada en Argentina y se me brindó la oportunidad de jugar en España, en la segunda. Una experiencia bonita, de las mejores.

¿Apuesta a volver a Europa?

Uno siempre busca mejorar, en todo sentido. No soy mucho de pensar dónde me voy a ir. Trato de vivir el día a día. En este momento tengo la cabeza metida en Curicó.

Giovagnoli lo dejó en la banca en sus primeros dos partidos. ¿Pensó que no jugaría?

No, nada. Nos encontramos con un DT nuevo que fue probando. Es normal, fue viendo a todos. Llegó a pocos días de empezar el torneo. Después, cada uno fue encontrando su lugar. Pero todos luchamos por el mismo objetivo.

¿Cuál es el objetivo?

Es más bien un gran sueño: meternos en una copa internacional. Toda la ciudad y la gente se lo merece.

¿Qué le parece el fútbol chileno?

Me siento muy cómodo. Se puede jugar tranquilamente. Se prioriza jugar al fútbol, y eso es lo que busco. Todos los equipos proponen algo.

Pero se está dejando jugar demasiado.

Ha habido de todo en estas 10 fechas. Equivocaciones, jugadas extrañas, aciertos... Las faltas se tienen que cobrar porque son faltas. Pero hay cosas y cuestiones que quedan acorde al contexto.

¿El fútbol chileno es más rápido que el argentino?

Acá los equipos no son tan bruscos como en Argentina, donde el fútbol es más friccionado. Se disfruta más en Chile que allí. El fútbol chileno tiene un toque europeo.

¿Lo llamaron de otros equipo chilenos antes de Curicó?

Sí, tuve unas llamadas de Palestino y no me recuerdo si otro club. Pero hoy estoy en Curicó enfocado totalmente.

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