El test de idoneidad de la Conmebol aprobó a los tres candidatos al sillón presidencial de la ANFP. Sebastián Moreno, Jorge Uauy y Harold Mayne-Nicholls recibieron el visto bueno para postular a la vacante que dejará Arturo Salah.

La candidatura de Harold Mayne-Nicholls, sin embargo, corría cierto riesgo. Según las 12 preguntas estipuladas por el ente rector sudamericano de fútbol en el test de probidad, ningún postulante podría haber recibido una sanción por parte de la FIFA. El extimonel, en 2015, recibió una castigo de dos años por violar los artículos del Código de ética relativos a las reglas generales de conducta (13), lealtad (15) y conflicto de intereses (19), mientras participó en la Comisión de Evaluación de las candidaturas a los mundiales de 2018 y 2022 concedidos a Rusia y Qatar, respectivamente.

En contacto con La Tercera, Mayne-Nicholls se refiere a la aprobación que recibió: "Siempre estimé que la sanción, igual después lo corroboró el TAS, fue desproporcionada. Ese castigo estaba cumplido y no veía cómo podía aumentarse. Igual hice todo lo que había que hacer: me presenté donde me tenía que presentar, presenté los documentos, todo. Ahora llegó esta resolución", dice el antofagastino.

"Nunca pensé que me podía complicar. Es como que te pasen un parte por ir a acceso de velocidad y no te dejen manejar más. La justicia se basa en poder reinsentarte en la sociedad. Cualquiera que reciba un castigo tiene derecho a volver a hacer una vida normal. No pueden ser eternos. En este caso era un castigo desproporcionado", agrega.

En relación a las elecciones, que se realizarán este jueves, a las 11 horas, Harold Mayne-Nicholls entregó su análisis: "Tiendo a creer que se resuelve el miércoles en la noche. El jueves, quizás, antes de la elección. Nosotros seguimos tratando de conseguir los votos para al menos llegar a la segunda vuelta", cierra.