Después del gol que significó el empate para Uruguay frente a Chile, Arturo Vidal reclamó por varios segundos. El volante de la Roja insistía en que había recibido una infracción por parte de Luis Suárez y en que por esa acción había terminado enviando el balón al fondo de las mallas. El juez brasileño Raphael Claus ni el VAR apreciaron la infracción, pese a que las imágenes televisivas muestran el contacto. Al Rey, la situación le quedó dando vueltas.

En ese contexto, al término del partido se produujo un sabroso diálogo entre ambos. El volante del Inter de Milán saluda cariñosamente al actual delantero del Atlético de Madrid. Ambos forjaron una relación estrecha en el paso común que tuvieron en el Barcelona. Sin embargo, el chileno no dejaría pasar la oportunidad para reprocharle una acción que considera ilícita.

“Le metí con todo”

Vo’ me pegaste una patada y la metiste”, le dice Vidal al goleador charrúa. “Le metí con todo ahí”, le responde Suárez. “Sí, huevón, me pegaste aquí”, insiste Vidal, indicando la zona en que recibió el impacto. “A mí me dolía toda esta parte”, le respondía Suárez en alusión a la zona de contacto.

El diálogo termina como cualquier conversación entre amigos. Una alusión a la humedad termina con la discusión futbolística “Acá la humedad es de locos”, dice el chileno, quien le pregunta a Suárez por la familia. El goleador devuelve la preocupación, ahora por los hijos de Vidal. El Rey le cuenta que están en Chile. Ambos se abrazan y emprenden la retirada. En sus manos, el ariete llevaba un recuerdo del otro nombre que lo une a Chile: la camiseta de Claudio Bravo, con quien también coincidió en el equipo culé.

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