La Selección enfrenta a Paraguay, esta noche, en el estadio Monumental. El partido es amistoso, pero para Eduardo Berizzo está lejos de ser un encuentro relajado. El técnico llega, literalmente, con el agua al cuello: no ha obtenido triunfos con el combinado adulto (solo fue capaz de vencer a Perú con la Sub 23) y tampoco ha sido capaz de conseguir un nivel de juego que satisfaga las expectativas de los hinchas ni de la dirigencia que encabeza Pablo Milad.
El entrenador llega amenazado por un ultimátum. Si la escuadra nacional no logra vencer a la Albirroja, el proceso del Toto puede terminar mucho antes que el plazo que se había delineado inicialmente: las Eliminatorias para el Mundial de 2026, que organizarán conjuntamente Estados Unidos, México y Canadá e, idealmente, la disputa del torneo planetario. Los malos resultados en el inicio del proceso derribaron las convicciones. Hoy, en la sede de la ANFP se teme que, como sucedió en el proceso de Reinaldo Rueda, el bajo nivel se prolongue hacia el inicio de la competición por los cupos y que el costo se termine pagando demasiado caro.
La exigencia
Pablo Milad procura ser mesurado en la antesala del duelo ante los guaraníes. “Hoy tenemos un compromiso, importante, no fundamental, porque es un partido amistoso, pero sí para consolidar un trabajo de una semana completa. Quisimos un solo rival para reunir esas sinergias y hacer una gran sinergia de este equipo que está trabajando muy intensamente. Y es palabra, también, de los jugadores, Berizzo trabaja muy profesional, muy intenso, con un ritmo diferente, al que, a lo mejor, el fútbol chileno no está acostumbrado”, sostiene, casi como un modo de avalar la gestión del transandino, quien estuvo antes en Juan Pinto Durán, como ayudante de Marcelo Bielsa.
Sin embargo, paulatinamente, va revelando el verdadero valor que tiene el duelo. “Hoy es un compromiso amistoso, pero tiene su significación, porque también hemos tenido algunas penas con la Sub 20, con el fútbol femenino. Necesitamos ganar para poder reactivar esa energía que todos necesitamos para nuestra Selección y también por la confianza que ellos pueden consolidar a través de un amistoso”, sostiene el máximo dirigente del fútbol chileno, en el marco de la presentación de la alianza con la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), que permitirá contar con apoyo médico y preventivo para jugadores e hinchas y ambulancias y puntos de atención durante el desarrollo de los encuentros.
En ese contexto, refuerza la necesidad de mejorar la imagen futbolística del equipo. “Lo importante es ganar y si no se gana, jugar muy bien. La Selección ha subido su rendimiento en estos dos o tres partidos. Los baluartes están con los chicos”, explica.
El dirigente llama a generar una actitud favorable. “Los chilenos, por lo general, somos bien solidarios cuando pasan grandes hechos en nuestro país. La Selección es un punto de alegría, de unión y también de frustraciones, pero también tenemos que cambiar un poco la mentalidad, visualizar con positivismo lo que viene. Hoy hay más bullying que nunca. Y los jugadores son jóvenes, ven redes y les influye. Hay que amar al fútbol”, sentencia.