La NBA ya tiene a su nuevo monarca. Milwaukee Bucks se convirtió por segunda vez en su historia en el campeón de la NBA. El elenco liderado por el griego Giannis Antetokounmpo se impuso en el sexto partido de la definición por 105-98 a los Suns de Phoenix.

A pesar de que terminaron en el tercer lugar de la Conferencie Este en la temporada regular, los Bucks lograron sostener un juego de alto nivel que les permitió quedarse con los anillos.

Eso sí, debieron batallar, pues en el inicio de la serie los Suns habían conseguido una ventaja de 2-0 que no les alcanzó a los representantes del Oeste.

También en este partido debieron dar vuelta el resultado, pues tras los primeros dos cuartos fueron los de Phoenix los que tenían la ventaja del partido por 47-42.

Por lo mismo, la figura de Giannis Antetokounmpo tomó relevancia, en especial por su abultado doble-doble de 50 puntos y 14 rebotes, superando lo logrado por Chris Paul y Devin Booker, que en conjunto sumaron 45 puntos.

“De la manera difícil”

Tras el partido, la figura y MVP de la final se refirió al título conseguido. “Significa mucho. Quiero agradecer a la ciudad de Milwaukee por acogerme, a mis compañeros por luchar tan duro cada día”, comentó. “Quería conseguir esto aquí y con ellos, así que estoy contento de haberlo logrado”, complementó.

Más tarde en la conferencia de prensa, recordó las razones que lo motivaron a quedarse con los Bucks tendiendo la posibilidad de cambiar de equipo. “Había un trabajo que tenía que terminar. Volviendo, dije, esta era mi ciudad, confían en mí, creen en mí, creen en nosotros, incluso cuando perdemos, la ciudad seguía de nuestro lado y obviamente Quería hacer el trabajo”, aseguró.

Es fácil ir a algún lado y ganar un campeonato con alguien más, es fácil. Podría ir a un súper equipo, hacer mi parte y ganar un campeonato. Pero lo hice de la manera difícil”, sentenció.

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