Rafael Nadal se llevó el título en tres sets en el Masters 1000 de Roma a costa de un errático y cansado Novak Djokovic. El número uno del mundo se encontró con un Rafa implacable, determinado, casi sin puntos débiles, que solo esperaba que fallara. Y así fue.

El serbio parecía no encontrar la fórmula para sobreponerse ante el constante ataque de Nadal. El manacorí respondía todos los golpes, no cedió un solo game y quebró todos los saques de Nole en el primer set.

A la vuelta del descanso, Djokovic se rearmó y gracias a unos buenos saques, logró defender sus juegos y remontaba de manera que daba para ilusionarse. Dos errores de Nadal le daban el quiebre y la segunda parte a Nole.

Con un 6-1 en el set definitorio quedó sentenciado el encuentro. El español estuvo impecable ante un frustrado Novak, que no podía encontrar la vuelta, erró dos remates en la red e incluso rompió su raqueta, a lo Kyrgios.

Rafa cortó una racha de siete meses sin ganar un campeonato. Desde agosto del año pasado que Nadal no levantaba una copa. El titulo no podría llegar en mejor momento, ante las dudas de sus seguidores sobre su nivel. Ayer demostró solidez y que llega de buena forma a su campeonato predilecto, Roland Garros.

Este es el noveno título para Rafa en Roma, el más ganador del torneo, y con ello consigue también el cetro al más campeón de Masters 1000 en la historia. El mallorquín llega a 34, relegando a Nole a 33 coronas. El rey de la arcilla llega a 58 títulos en su superficie favorita, justo en la previa de París.

Por su parte, el campeonato femenino lo ganó la checa Karolina Pliskova, que superó a la británica Johanna Konta en dos sets 3-6 y 4-6.