El puñetazo del australiano Andrew Moloney tumbó sin apelaciones al chileno Miguel 'Aguja' González. Por primera vez, el púgil nacional besaba la lona. Se desplomaba inconsciente sobre el piso del cuadrilátero montado en el Arena Monticello. El público quedaba en silencio. Se iba, de paso, la opción de que el crédito local pueda desafiar al inglés Khalid Jafai, el dueño del cinturón mundial de la Asociación Mundial de Boxeo, AMB.
Transcurría el octavo asalto de un combate parejo en todo su desarrollo. Con el océanico dominando la primera parte, haciendo tambalear al chileno en el cuarto asalto. Y luego, resistiendo la ofensiva del nacional, que logró meter un par de manos en el sexto asalto, aunque Moloney siempre se vio más entero. Eso sí, el australiano recibió una cuenta de protección.
En la octava vuelta, vino esa mano letal. González se desplomó. Y con su caída, también se iba el sueño de ver a un chileno campeón del mundo. La reacción fue triste, pero respetuosa. Moloney recibó el reconocimiento del público y también de su rival. El desafío al campeón del mundo deberá esperar.