José Mourinho está otra vez en la polémica. El entrenador portugués tomó una determinación que, de acuerdo a los principales medios ingleses, no gustó al camarín. Y es que, de acuerdo a lo que informan, el adiestrador programó una práctica para las cuatro de la tarde del 25 de diciembre.

No piensa en festejos el luso y solamente se enfoca en la competencia. El Manchester United se mide ante el Huddersfield, el 26 de diciembre en el tradicional Boxing Day, por lo que el director técnico no consideró el reclamo de sus futbolistas, que pidieron que el entrenamiento fuera al menos durante la mañana para poder compartir con sus familias. Repite la que, a estas alturas, es una tradición, ya que durante los últimos dos años ha entrenado en Navidad.

Las dos veces anteriores, en tanto, solamente la intervención de la directiva impidió que el entrenamiento se realizara en Old Trafford, como quería el técnico, pues eso obligaba a los trabajadores del equipo (además de a los jugadores) a un desplazamiento mayor y, por ende, restringía sus opciones de compartir en familia la festividad de aquel día. Este año, eso sí, aún no está definido el lugar de los trabajos, aunque la polémica ya está desatada.

El cuadro de los Diablos Rojos marcha en el sexto lugar de la Premier League, con 26 puntos en 16 jornadas, a 16 unidades del líder de la competencia, el Liverpool, a quien enfrentarán en la jornada de este fin de semana. Entendiendo que no tiene margen, Mourinho no quiere más desconcentraciones.