José Mourinho suele ser parco. E irritable si algo le molesta. Más todavía en la antesala de un clásico como el que mañana Manchester United afrontará ante el Manchester City de su archirrival, Josep Guardiola.
En plena conferencia de prensa previa al duelo, la prensa inglesa recordó la operación que les permitió a los Diablos Rojos quedarse con Alexis Sánchez, un antiguo deseo de Pep para los Citizens. Le plantearon la tesis de que el United podía competir por los fichajes con su clásico adversario, que se ha caracterizado por invertir grandes sumas de dinero para tentar a los principales futbolistas en el mundo. Mourinho cambió de semblante y respondió con dureza: "Esa es tu opinión. ¿Gastaron dinero en enero? ¿Lo sabían? ¿Pueden confirmarlo? No sé, no tengo idea de si estaban interesados en Sánchez o no. No sé. No puedo confirmarlo".
Después aclaró cuál es su motivación en la actual Premier League. ""Mi motivación es terminar en segundo lugar", dijo. "Todavía tengo la motivación de terminar entre los cuatro primeros. Matemáticamente no está resuelto. Es una buena distancia, pero no matemáticamente, así que ese es el primer objetivo", sostuvo.