El portugués José Mourinho no vive su mejor momento. El entrenador del Manchester United está en el ojo de la polémica en Inglaterra por el mal momento que atraviesa su equipo y por sus públicas disputas con Paul Pogba y Alexis Sánchez, figuras de su alicaído elenco. Pero no es todo y, ahora, el DT está enfrascado en una disputa con la policía de Manchester, con quienes entró en conflicto a raíz del retraso que presentaron los Diablos Rojos al llegar al estadio para medirse al Valencia, por la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League.

En concreto, el conjunto que adiestra el luso no llegó a tiempo a Old Trafford debido a la alta congestión de vehículos en la ciudad, lo que obligó incluso a los comisarios de la UEFA a retrasar cinco minutos el inicio del compromiso que a la larga terminó en igualdad sin goles. El atraso, sin embargo, no fue tomado como una anécdota por el entrenador y, en la conferencia de prensa posterior al encuentro, se lanzó en contra de la policía. "El atraso fue por culpa única y exclusiva de la policía. Ellos se negaron a escoltarnos hasta el estadio", denunció el estratega. "Es insólito: nos demoramos más de una hora en llegar del hotel a Old Trafford", agregó respecto de la situación que, además, le costó al club la apertura en su contra de un procedimiento disciplinario por parte de la Asociación europea.

"Pensamos que con 30 minutos sería suficiente, como suele ser. Pero la policía rechazó escoltarnos, así que vinimos por nuestra cuenta", contó. "La UEFA y el árbitro estuvieron bien porque nos permitieron empezar el partido cinco minutos más tarde porque al menos necesitamos media hora para prepararnos. Pero no fue un problema con la organización. Nos anticipamos a todo lo que podía ser peligroso acerca de llegar tarde pero la policía nos informó de que habían rechazado acompañarnos hasta el estadio", insistió.

La respuesta de la Greater Manchester Police (GMP), sin embargo, no se hizo esperar. El inspector jefe de la entidad, Andy Sutcliffe, expresó enfático: "El United sabía previamente que no recibirían escolta policial. Todos los despliegues se llevan a cabo siguiendo un proceso de evaluación de riesgos integral específico para cada partido. Las escoltas solo se hacen en ocasiones puntuales que hay información que pueda sugerir que habrá riesgos o amenazas para los jugadores". Y remató: "Esta información la manejan los clubes. Desde hace meses que es igual. Y todos los equipos tienen tiempo suficiente para planificar sus viajes y traslados para evitar este tipo de inconvenientes".